Archivo

Entradas Etiquetadas ‘Tomás Vergara’

Pablo Simonetti: “Reconocí mi homosexualidad ante mis padres recién a los 27; me costó mucho”.

Jueves, 24 de abril de 2014
Comentarios desactivados en Pablo Simonetti: “Reconocí mi homosexualidad ante mis padres recién a los 27; me costó mucho”.

ac299ad976645e86f4850f1cb09f740fFuente: Revista Ñ (Clarín), vía SentidoG

El escritor chileno habla de su última obra, ‘La soberbia juventud’: “Lo que yo quería era contar una historia de crecimiento personal que estuviera cruzada con una historia de amor”, dice.

“Lo que yo quería era contar una historia de crecimiento personal que estuviera cruzada con una historia de amor”, define el escritor chileno Pablo Simonetti su última obra, La soberbia juventud (Alfaguara 2014). Simonetti es un best seller que, en Chile, ha llegado a superar en ventas a Isabel Allende.

Alto, elegante, educado y homosexual, escribe sobre personajes gay en el Chile católico y de clase alta. Es autor y militante: organizó la Fundación Igualdad, que trabaja por los derechos de la diversidad sexual y aunque se propone no militar con la literatura, desde ese lugar (también) habla.

Estuvo hace unos días en Buenos Aires presentando La soberbia juventud. En esta nueva novela, Simonetti nos introduce en la vida de Felipe Selden, un joven de la alta sociedad chilena, homosexual, atractivo y carismático, capaz de seducir a todos aquellos que se encuentren a su alrededor. Selden parece tenerlo todo, pero su inmadurez y cierta soberbia, harán que tome las peores decisiones. Mientras tanto, el escritor Tomás Vergara observa todo lo que sucede. Una galería de personajes variopintos que se mueven entre el amor y el desamor, entre la libertad personal y las convenciones sociales completan el elenco, hasta conformar el relato de unas personas que poco a poco se van convirtiendo en una familia, en la que la sangre no es lo importante. “La novela es, además, la historia de una familia no convencional”, dijo Pablo Simonetti a Clarín.

¿Cuánto hay de autobiografía?

En el tema del amor desesperado es algo que viví, y fue una experiencia tras la que sentí que la vida me había cambiado, nunca había experimentado ese grado de descontrol y euforia, totalmente fuera de mi forma de ser. Por otro lado, claro que es muy autobiográfica, porque el núcleo de los problemas que hay en ella es algo de lo que yo he sido testigo y he vivido en mi tiempo, pero también he presenciado en los jóvenes gays de hoy.

¿Por ejemplo?

Yo reconocí mi homosexualidad ante mis padres cuando tenía 27 años, fue muy difícil. Me costó mucho, incluso sabiendo lo que sentía me costaba aceptarlo. Hasta que un día le conté a mi familia y reaccionaron muy mal… claro que era un momento en el que la sociedad chilena era muy cerrada, recién salíamos de una dictadura y la OMS decía que era una enfermedad….

¿Se está abriendo la sociedad chilena o sigue igual de cerrada?

Cada vez tenemos una sociedad más abierta, creo que en unos tres años vamos a tener una ley de matrimonio igualitario. Claro que sigue habiendo sectores que son muy retrógrados y que no van a cambiar, pero los escándalos de abusos sexuales dentro de la Iglesia cambiaron todo, porque la Iglesia perdió la autoridad para poner normas a la vida sexual de las personas.

La novela habla de la intolerancia de la familia y la creación de una propia.

Me parece que hoy, ante las estructuras tradicionales en las que muchos ya no parecen caber, la creación de esos nuevos espacios afectivos es muy importante. Generalmente se crean por marginalidad, pero yo creo que deberían coexistir con los espacios tradicionales, tener un espacio de unión con la familia tradicional, no creo que uno deba estar siempre perdiendo sus lugares de pertenencia para pertenecer a unos nuevos. Debería haber una continuidad.

Los personajes femeninos son los determinantes.

Un mundo homosexual sin mujeres no existe. Los hombres gay suelen vivir en comunidad con mujeres, una mujer suele ser la mejor amiga… la vida es así, son las mujeres las que producen los grandes quiebres, y en esta novela, también. Son ellas quienes conducirán la vida de Felipe por caminos que él no imaginó y por otro lado está su madre, que pretende evitar que su hijo vaya por el camino que eligió.

¿Qué tiene que tener una historia para que decidas escribirla?

Me interesan dos temas especialmente: la pareja y la familia, y cómo se ejerce el poder en esos espacios íntimos. El otro tema es el desarrollo de la identidad.

Biblioteca, General , , , , , , , ,

“La soberbia juventud”: un hijo gay en una familia del Opus Dei.

Martes, 1 de abril de 2014
Comentarios desactivados en “La soberbia juventud”: un hijo gay en una familia del Opus Dei.

portada-soberbia-juventud_grandeLa última novela del chileno Pablo Simonetti se publica en España

Si el escritor Tomás Vergara hubiera sido más joven se habría enamorado de Felipe Selden nada más conocerle. Por suerte, le protegen sus 52 años y esa seguridad  que da la edad; la seguridad de saber cuándo alguien es inalcanzable y de qué hay que escapar. Porque Felipe Seldén, un joven extremadamente bello y carismático, es de esos hombres capaces de enamorar a la mayoría de las personas que se encuentran con él. Y eso es precisamente lo que le pasa a Camilo Suárez, amigo de Tomás y amante ocasional de Felipe.

A sus 27 años, Selden acaba de terminar un máster en diseño urbano en Estados Unidos, donde ha logrado asumir su homosexualidad, y ahora se esfuerza en hacerla pública ante su familia, burguesa, derechista y del Opus Dei, y su círculo de amigos de la escuela católica. Demasiadas exigencias familiares y sociales que, sumadas a su inmadurez, lo llevan a tomar decisiones que lo alejan de la felicidad y de quienes de verdad le aman, como Camilo, a quien sólo dará cabida en su vida cuando la noche le empuja a buscar refugio en su cama.

Tomás Vergara, gay reconocido entre las clases altas de Santiago, conoce bien el mundo al que Selden se va integrando poco a poco, e intentará servirle de consejero “espiritual”. Pero el joven, a quien una tía abuela convierte en millonario tras nombrarlo su único heredero, tardará años en comprender que no bastan sus dones, talentos y fortuna para alcanzar la libertad que considera suya por derecho propio.

No será hasta que encuentre  en su camino a personas liberales –y liberadas– como Elvira Tagle y Santiago Pumarino cuando entienda que aspirar a una vida plena y feliz depende sólo de él y de la idea que tenga de sí mismo. Para entonces, algo habrá dejado escapar, algo que, superada ya la treintena, sólo llegó a sentir en brazos de Camilo.

La última novela del chileno Pablo Simonetti que publica Alfaguara en España –en diciembre de 2013 la comercializó en su país con gran éxito de crítica y ventas– es un relato sobre el amor y el fin de la inocencia, en la que “el núcleo del conflicto –señaló su autor en una entrevista concedida en Chile– es el amor desesperado”.

Pero también, y en gran medida, ha querido Simonetti hacer una crítica social –como en otras de sus anteriores obras–, con un argumento que narra las experiencias de Felipe Selden, un joven homosexual, que proviene de una familia acomodada, conservadora y del Opus Dei, que busca encontrar su lugar de pertenencia, “no solo de referentes o maestros –dice el autor–, sino también de afectos y apegos”. “En el fondo este libro es una metáfora de la incapacidad de la élite chilena de aceptar que hoy vivimos un país diverso y pluralista, que necesita ser representado y visto en el espacio público”, explica Simonetti, reconocido activista en favor de los derechos de los homosexuales en su país.

Simonetti-200x300Una novela autobiográfica, en la que Pablo Simonetti no es otro que el narrador –encarnado por el escritor Tomás Vergara quien, como él, ha rebasado la barrera de los cincuenta y ha reconocido públicamente su homosexualidad–, “con relaciones y conflictos muy cercanos”, ha declarado el escritor chileno, quien fue criado en el seno de una familia de inmigrantes italianos muy católicos y, contra todo pronóstico,  decidió dedicarse a la literatura y hacer pública su homosexualidad tras la muerte de su padre. “Esta obra es muy autobiográfica, porque la esencia de los problemas que hay en ella es algo de lo que yo he sido testigo y he vivido en mi tiempo, pero que también he presenciado en los jóvenes homosexuales de hoy. Reconocer una opción sexual distinta a la tradicional tiene un altísimo costo e implica no sólo perder el trabajo, también el rechazo de la familia y, finalmente, el aislamiento social.”

“La soberbia juventud” aborda –con una prosa sencilla pero muy trabajada– el desarrollo de la identidad de Selden, el apuesto protagonista, donde uno de los componentes es su homosexualidad, pero no el único, pues también están muy presentes las creencias religiosas, las inclinaciones políticas –se declara abiertamente de derechas–, la educación recibida y la influencia de la familia, que el joven no cree contrarias a su identidad sexual. “En la novela intento mostrar que Selden representa a personas homosexuales que recién hoy están lidiando con esas dificultades”, explica Simonetti.

Una obra, en definitiva, que reflexiona sobre la soberbia de la juventud –en cuanto a lo maravillosa y, a la vez, peligrosa que puede resultar–, que habla de la necesidad de no hacerse una idea equivocada de uno mismo –aunque esa sea la idea que tienen y quieren para nosotros los demás– y de cómo la edad puede condicionar nuestro juicio, hasta el punto de hacer mover la balanza hacia un lado u otro de la felicidad. Porque, es evidente que todos aspiramos a ser plenamente felices, pero en demasiadas ocasiones –sobre todo cuando somos jóvenes y nos creemos dueños de nuestro destino–, avanzamos por el camino equivocado. Y no está de más preguntarse, de vez en cuando, por qué.

Fuente Ociogay

Biblioteca, Iglesia Católica , , , , , ,

Recordatorio

Cristianos Gays es un blog sin fines comerciales ni empresariales. Todos los contenidos tienen la finalidad de compartir, noticias, reflexiones y experiencias respecto a diversos temas que busquen la unión de Espiritualidad y Orientación o identidad sexual. Los administradores no se hacen responsables de las conclusiones extraídas personalmente por los usuarios a partir de los textos incluidos en cada una de las entradas de este blog.

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Por supuesto, a petición de los autores, se eliminará el contenido en cuestión inmediatamente o se añadirá un enlace. Este sitio no tiene fines comerciales ni empresariales, es gratuito y no genera ingresos de ningún tipo.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un espacio de información y encuentro. La información puede contener errores e imprecisiones.

Los comentarios del blog estarán sujetos a moderación y aparecerán publicados una vez que los responsables del blog los haya aprobado, reservándose el derecho de suprimirlos en caso de incluir contenidos difamatorios, que contengan insultos, que se consideren racistas o discriminatorios, que resulten obscenos u ofensivos, en particular comentarios que puedan vulnerar derechos fundamentales y libertades públicas o que atenten contra el derecho al honor. Asimismo, se suprimirá aquellos comentarios que contengan “spam” o publicidad, así como cualquier comentario que no guarde relación con el tema de la entrada publicada. no se hace responsable de los contenidos, enlaces, comentarios, expresiones y opiniones vertidas por los usuarios del blog y publicados en el mismo, ni garantiza la veracidad de los mismos. El usuario es siempre el responsable de los comentarios publicados.

Cualquier usuario del blog puede ejercitar el derecho a rectificación o eliminación de un comentario hecho por él mismo, para lo cual basta con enviar la solicitud respectiva por correo electrónico al autor de este blog, quien accederá a sus deseos a la brevedad posible.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.