Suspenden un partido de futbol de la liga… pero no, no es por llamar a alguien «maricón»
Que existe homofobia en los estadios de fútbol es una obviedad.
Ya no es que futbolistas de élite no salgan del armario por miedo a las consecuencias – la sombra del final Justin Fashanu es alargada –, es que maricón se usa como insulto para personas que probablemente no lo sean – los «Guti maricón» o «Cristiano Ronaldo maricón» son ya todo un clásico.
Tristemente no solo se insulta por la condición sexual, también la raza o las capacidades se emplean para descalificar.
Y aunque se habían detenido partidos de Liga por insultos, nunca hasta ayer se habían suspendido. Qué triste tener que llegar a tomar esa medida, pero hay cosas que son intolerables. ¿Y qué insulto le pareció al estamento arbitral, y por ende, a la Liga, tan fuerte como para detener un partido? Llamar nazi al jugador del Albacete Zozulya.
Es buen momento para hacer un hilo explicando porqué la afición del Rayo Vallecano ha llamado nazi a Zozulya. ¿Realmente este señor es nazi? Pues aquí voy a poner un hilo bien bonito desvelando a este tipo.
Dentro hilo 👇👇👇 pic.twitter.com/2CwD7prwKO
— Raúl Conde ۞ (@raulconde97) 15 de diciembre de 2019
La historia del futbolista ucraniano es de lo más variopinta. Fichado por el Rayo Vallecano, fue repudiado por la que era su nueva afición (conocida por ser una de las más comprometidas por las causas sociales) por su simpatía hacia la ultraderecha. ¿Es nazi Zozulya? No lo sabemos, pero hay bastante documentación en internet que parece confirmarlo. Habría que preguntarle al propio deportista si la denominación de «nazi» le parece despectiva o no.
Es habitual cuando hablamos de insultos en campos de fútbol que alguien argumente que la gente no se hace a malas, sino que es por incordiar al contrario. El problema llega con los términos. Yo soy lesbiana y me puedo denominar lesbiana. O bollera. O lo que a mí me de la gana. Para mí ser lesbiana no es un insulto. Del mismo modo, tú puedes ser gay y llamar a tus amigos homosexuales «maricón» (porque hemos sabido apropiarnos de la palabra). Este mismo ejemplo es aplicable a las personas racializadas. La cuestión es que alguien está usando lo que tú eres como insulto, porque le parece que lo que eres es algo malo o inferior, incluso usando términos peyorativos. ¿Ser homosexual es algo malo? ¿Y ser nazi?
Todavía me acuerdo cuando el árbitro, en vez de parar el partido, paró a Eto’o pic.twitter.com/qLvQxTgCuW
— Tikko ® (@tikotikoh) 16 de diciembre de 2019
Volviendo al punto anterior, quizás a Roman Zozulia le moleste que le llamen nazi, sea de ultraderecha o no. Lo que sí llama la atención es que hayamos escuchado gritos emulando a un mono, lanzamientos de plátanos o que el término «maricón» haya retumbado por los estadios y nunca se haya suspendido un partido de la liga.
Esperemos que sea una cuestión de sensibilidad y que ahora la liga esté comenzando a adquirir un mayor compromiso contra los insultos, aunque muchos habríamos agradecido que se hubiera comenzado antes y con colectivos que han sufrido y sufren de discriminación.
Fuente AmbienteG, por
Comentarios recientes