La cancelación de DACA afecta a alrededor de 75.000 integrantes de la comunidad LGBT
La decisión de Donald Trump de cancelar las ayudas que porporciona DACA afecta a hasta alrededor de 36 millones de personas, de las que unos 75.000 pertenecen al colectivo LGBT.
Tras considerar si prefería dejar que DACA, el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia ( Deferred Action for Childhood Arrivals ) aprobado por la administración de Barack Obama, expirara gradualmente o finalizarlo por decreto, Donald Trump decide finalmente lo segundo el martes pasado, 5 de septiembre. De esta manera despoja a cerca de 800.000 inmigrantes estadounidenses y sus familias de la seguridad y estabilidad que les habían proporcionado las ayudas a los denominados dreamers (soñadores), los no documentados que llegaron a los Estados Unidos siendo menores de edad, que en la actualidad están integrados en la sociedad tras haber recibido formación como si fueran estadounidenses, la posibilidad de recibir becas y atención médica, además de acceder a un puesto laboral.
«Resolveremos la cuestión de DACA con sentimiento y compasión, pero a través del proceso democrático legal. ¡Es hora de que el Congreso actúe!», declara Donald Trump al anunciar su decisión que pone en riesgo a alrededor de 36 millones de «soñadores» protegidos por DACA, de entre los que 75.000 pertenecen al colectivo LGBT, según el Instituto Williams de la Escuela de Leyes de la Universidad de California, en Los Angeles.
«Los miles de jóvenes protegidos por DACA no conocen otro país que los Estados Unidos. Eliminar esta protección los obliga a abandonar sus trabajos y desestabiliza economías familiares y comercios, lo cual traerá graves consecuencias en la economía nacional», asegura Roddy Flynn, director de LGBT Equality Caucus, organización que representa al colectivo LGBT en el congreso.
«Sabe de primera mano cómo la comunidad Latina LGBTQ que vive en los Estados Unidos está experimentando un momento intenso y complicado. Sólo en Texas, queda mucho por hacer para asegurar que todos y cada uno de los texanos LGBTQ, indocumentados o acogidos a DACA, puedan vivir de manera segura, auténtica y libre de discriminación independientemente de su identidad de género u orientación sexual», declaran desde Equality Texas, advirtiendo de lo que supone este serio recorte para los afectados por el huracán Harvey, que al no estar ahora amparados por DACA, podrían no tener acceso a servicios sanitarios.
Si bien el congreso estadounidense tiene seis meses para tomar una decisión sobre el futuro de los «soñadores», aquellos que pertenecen al colectivo LGBT no dejan de mostrar su preocupación al respecto dado que no sólo se enfrentan a una posible deportación a un país cuya forma de vida es muy diferente a la que han desarrollado en los Estados Unidos, sino que en muchos casos se enfrentan a volver a países en los que la homosexualidad está penada por la ley.
Fuente Universogay
Comentarios recientes