El Departamento de Educación ha otorgado una exención religiosa a partes del Título IX a la Universidad de Baylor en Waco, Texas.

El Departamento de Educación de los EE. UU. otorgó una exención religiosa a la Universidad de Baylor que elimina su obligación de tomar medidas sobre las denuncias de acoso sexual que involucran a estudiantes LGBTQ+.

La Universidad de Baylor, una universidad privada de investigación cristiana bautista en Waco, Texas, envió una carta a la Oficina de Derechos Civiles del Departamento de Educación el 1 de mayo, solicitando garantías “de que la universidad o sus estudiantes creen o practican sus principios religiosos”. no constituiría una “conducta no deseada” según la definición del departamento de “acoso sexual” según el Título IX.

Según los informes, esta solicitud se produjo después de que se presentaran cuatro denuncias de acoso contra la escuela, incluida una acusación de que la escuela no respondió a los estudiantes que fueron acosados por su género o identidad sexual.

El Departamento de Educación de EE. UU. accedió a la solicitud de la Universidad de Baylor el 25 de julio, lo que significa que el personal y los estudiantes no pueden ser acusados de acoso sexual por su comportamiento hacia las personas LGBTQ+, lo que estaría prohibido por el Título IX cuando el comportamiento esté justificado de acuerdo con sus creencias religiosas y practicas

La exención de Baylor también significa que la universidad no perderá ningún financiamiento federal si no responde a las denuncias de acoso sexual en el campus.

In a 2021 letter to the Department of Education Office of Civil Rights, @Baylor requested a religious exemption for the following three claims: pic.twitter.com/xSHVXctJIa

— Religious Exemption Accountability Project (@REAP_LGBTQ) August 10, 2023

Según el Proyecto de Responsabilidad de Exención Religiosa (REAP) esta es la primera vez que una universidad solicita una exención religiosa del Título IX para permitir el acoso sexual y la primera vez que el Departamento de Educación otorga tal solicitud.

El año pasado, la administración de Biden propuso enmiendas al Título IX, una ley de derechos civiles que prohíbe la discriminación por motivos de sexo en cualquier escuela o programa educativo financiado por el gobierno.

Las enmiendas incluyeron una definición ampliada de acoso sexual para incluir el acoso basado en la orientación sexual, la identidad de género, el embarazo y cualquier situación que cree un “ambiente hostil”. Bajo el Título IX, las instituciones que no respondan a los informes de “acoso basado en el sexo, que abarca la agresión sexual y otras formas de violencia sexual” en el campus serán despojadas de cualquier financiamiento del gobierno.

Sin embargo, las instituciones religiosas, incluidas escuelas, colegios y universidades, aún pueden solicitar la exención del Título IX argumentando que las disposiciones de la ley chocan con sus creencias.

Un portavoz de Baylor le dijo a PinkNews que ampliar la definición de acoso sexual para incluir las identidades LGBTQ+ “podría infringir los derechos de Baylor en virtud de la Constitución de los Estados Unidos”.

En su carta solicitando la exención, la rectora de la universidad, la Dra. Linda Livingstone, escribió que Baylor “regula la conducta que es incompatible con los valores y creencias religiosos que son parte integral de su fe cristiana”.

Livingstone argumentó que cuatro denuncias, presentadas contra la universidad y presentadas ante la Oficina de Derechos Civiles, “deben ser desestimadas porque las acusaciones implican directamente la exención religiosa de Baylor” del Título IX.

Las cuatro quejas alegan que la escuela violó la ‘Declaración sobre la política de conducta sexual y sexualidad humana’ del Título IX. La política estipula: “Ninguna persona en los Estados Unidos, por motivos de sexo, será excluida de la participación, se le negarán los beneficios o será objeto de discriminación en ningún programa educativo o actividad que reciba asistencia financiera federal”.

Una queja alega que la escuela no respondió a los estudiantes que fueron “objetos de acoso por su orientación sexual y/o identidad de género”, informó The Messenger.

El portavoz de la Universidad de Baylor le dijo a PinkNews: “Es desafortunado que la afirmación de la Universidad de Baylor de su exención religiosa existente con el Departamento de Educación de los EE. UU. esté siendo malinterpretada como una excepción amplia a la política de acoso sexual dentro de las Regulaciones del Título IX. En cambio, Baylor está respondiendo a las consideraciones actuales del Departamento de Educación de los EE. UU. para pasar a una definición ampliada de acoso sexual, lo que podría infringir los derechos de Baylor según la Constitución de los EE. UU., así como el Título IX, para llevar a cabo sus asuntos de una manera consistente. con sus creencias religiosas.

“Baylor ha tomado y seguirá tomando medidas significativas para garantizar que los miembros de la comunidad LGBTQ sean amados, cuidados y protegidos como parte de la familia Baylor. Además, la Universidad mantiene su compromiso de promover y mantener un entorno educativo en el que los estudiantes puedan aprender y crecer de acuerdo con nuestra misión cristiana y nuestro llamado a amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos”.

En respuesta a la solicitud de exención de Baylor, Catherine E. Lhamon, subsecretaria de derechos civiles, escribió: “El Título IX no se aplica a una institución educativa controlada por una organización religiosa en la medida en que la aplicación sea incompatible con los principios religiosos de la organización controladora”.

Las creencias religiosas en el caso de la Universidad de Baylor son la “doctrina del matrimonio y la distinción creada entre hombres y mujeres”.

El Proyecto de Responsabilidad de Exención Religiosa (REAP), una organización sin fines de lucro creada para estudiantes LGBTQIA+ y aliados en colegios y universidades religiosas, dice que “las exenciones religiosas se utilizan para abusar de los estudiantes queer y trans. Evidentemente, controlar la capacidad de las personas para vivir su sexualidad, identidad de género y/o expresión de género no califica como discriminación a los ojos de la Universidad de Baylor. Y tampoco el acoso sexual”, escribió REAP en X, anteriormente conocida como Twitter.

Agregaron: “La indignación no es solo que la Universidad de Baylor llegara a solicitar una exención religiosa al acoso sexual, sino también que el Departamento de Educación acceda a su solicitud. El gobierno de los EE. UU. continúa permitiendo que los colegios y universidades religiosos financiados por los contribuyentes dañen y abusen de los estudiantes LGBTQIA+ sin rendir cuentas”.

REAP actualmente está desafiando al Departamento de Educación por otorgar exenciones religiosas en una demanda histórica.

Esta no es la primera vez que la administración Biden muestra su apoyo a los colegios y universidades religiosas anti-LGBTQ+.

En 2021, presentó una moción legal alegando que comparte el “mismo” objetivo que las escuelas religiosas anti-LGBT+, y el departamento de justicia dijo que puede defender “enérgicamente” la discriminación religiosa en estos colegios y universidades.

Fuente PinkNews

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Un grupo de estudiantes LGBT + ha presentado una demanda colectiva contra el gobierno de los EE. UU. Para evitar que las escuelas religiosas reciban fondos federales para discriminar a los estudiantes queer.

El The Religious Exemption Accountability Project-Proyecto de Responsabilidad de Exención Religiosa (REAP) anunció el martes 30 de marzo que presentó una demanda en el tribunal de distrito de EE. UU. En Oregón en nombre de 33 estudiantes LGBT + actuales y anteriores de 25 escuelas religiosas evangélicas.

El caso depende del Título IX, la ley federal de derechos civiles que prohíbe la discriminación basada en el sexo, pero contiene una exención para los derechos religiosos. Actualmente, las instituciones religiosas, incluidas las escuelas y las instituciones de educación superior, están exentas de las normas federales que prohíben a los organismos “excluir, separar, negar beneficios o tratar a los estudiantes de manera diferente en función del sexo”.

La demanda argumenta que la exención religiosa del Título IX “permite una discriminación generalizada contra los estudiantes LGBTQ en los colegios y universidades religiosas de todo el país”. Los estudiantes alegaron que enfrentaron discriminación en universidades y colegios universitarios religiosos financiados con fondos federales, lo cual fue permitido debido a la exención del Título IX.

Paul Southwick, abogado y director de REAP, dijo que la demanda pedirá a un tribunal federal que “declare que la exención religiosa al Título IX, aplicada a una clase de estudiantes LGBTQ + que asisten a las más de 200 universidades afiliadas a la religión en los Estados Unidos que discriminarlos abiertamente, utilizando dólares de los contribuyentes, es inconstitucional . Es una violación de la prohibición de la Primera Enmienda sobre el establecimiento de la religión y una violación de la garantía de Igualdad de Protección de la Quinta y Decimocuarta Enmienda bajo la ley para los estadounidenses LGBTQ +”, dijo Southwick.

Alex Duron, un hombre gay que es uno de los demandantes en la demanda, dijo que su admisión en un programa de posgrado en enfermería en Union University en Jackson, Tennessee, fue revocada después de que la institución descubrió que vivía con su pareja masculina. Dijo que las políticas de Union “me negaron el acceso al programa de enfermería de mi elección financiado con fondos federales. Una institución financiada con fondos federales no debería poder elegir quién puede recibir una educación”, dijo Duron. “Debería haber estado protegido por el Título IX, pero no por una exención religiosa”.

Lucas Wilson, otro demandante en el caso, le dijo a NBC News que fue sometido a la práctica cruel y pseudocientífica de la terapia de conversión de un club de estudiantes mientras asistía a Liberty University en Lynchburg, Virginia, de 2008 a 2012.

Admitió que el “factor más importante” por el que eligió asistir a la universidad “fue en última instancia el programa de terapia de conversión porque yo, de hecho, creía que uno podía volverse heterosexual”. Wilson también alegó que tuvo varias clases que enseñaron los “males del estilo de vida homosexual”. Añadió que el grupo de terapia de conversión y la cultura homofóbica en Liberty “amplificaron y agravaron los sentimientos de odio hacia uno mismo, sentimientos de vergüenza, culpa y ansiedad que finalmente tardaron años en deconstruirse”.

Un portavoz del Departamento de Educación dijo a NBC News que la administración de Joe Biden está “totalmente comprometida con el acceso igualitario a la educación para todos los estudiantes”.

El portavoz señaló una orden ejecutiva que Biden emitió a principios de este mes que decía: “Se debe garantizar a todos los estudiantes un entorno educativo libre de discriminación por motivos de sexo … incluida la discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género. Para los estudiantes que asisten a escuelas y otras instituciones educativas que reciben asistencia financiera federal, esta garantía está codificada, en parte, en el Título IX de las Enmiendas de Educación de 1972, 20 U.S.C. 1681 et seq., Que prohíbe la discriminación por motivos de sexo en los programas o actividades educativos que reciben asistencia financiera federal ”.

Se ha contactado a Liberty University y Union University para solicitar comentarios.

Fuente Pink News

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