Crimen de odio de un estilista en Perú: buscan al cuarto sospechoso
Javier Pauca Serna, de 56 años, fue maniatado y apuñalado en el distrito de La Molina en Lima.
Los sospechosos se tomaron foto después del homicidio.
LIMA, Perú. El estilista Javier Pauca Serna, de 56 años, fue apuñalado en el distrito de La Molina en Lima. Lo encontraron el 7 de abril en su vivienda y tenía signos de tortura. La Policía Nacional detuvo a tres sospechosos del asesinato. Tenían en su poder un teléfono móvil, tarjetas y documentos de Serna, dijeron fuentes policiales a Presentes. Javier era muy querido por su familia y vecines.
Los sospechosos Omar Huamán Ángeles (19), Luis Humberto Popayán (19) y Manuel Ocaña Morote (29) acusaron a un cuarto hombre, “Jordi”, de planificar el robo y asesinato. Según declararon, él era la pareja de Serna.
Los tres detenidos cuentan con antecedentes policiales por los delitos de microcomercialización de drogas y violencia física.
El 10 de abril a la noche se realizó la reconstrucción del crimen en la vivienda de Serna. La intervención terminó con ocho balazos al aire lanzados por la Policía para dispersar a los familiares, amigos y clientes de Javier Pauca Serna. Estaban allí para reclamar justicia. Algunos intentaron linchar a los sospechosos, que habían sido llevados al lugar.
En Perú no existe un reconocimiento legal de los crímenes de odio. El Movimiento LGBTIQ+ de El Callao realiza incidencia para que existan ordenanzas de alcance local que ayuden a mitigar las situaciones de violencia.
Estereotipos que terminan en crímenes
«Las personas LGBTIQ rompemos los supuestos mandatos sociales, las normas de lo que es ser un hombre y una mujer, y cuando quebrantas eso te conviertes en una persona más vulnerable. Por eso la violencia que hay contra nosotrxs es más incisiva, es así porque irrumpimos con lo que todos dicen que es supuestamente ‘normal’, cuando sabemos que ese es un pensamiento erróneo», explica Jonás Muñoz, coordinador del Movimiento LGBTIQ+ del Callao.
Para Muñoz se debe realizar un trabajo de sensibilización desde temprana edad, tocando los temas con los más jóvenes.
«Hay que trabajar desde lo comunitario, debemos organizarnos en nuestros barrios, distritos y regiones para empezar a generar espacios de acompañamiento, para que a partir de ahí empecemos a fortalecernos y empoderarnos el uno con el otro, ya que eso podría lograr que se prevengan crímenes como el de Javier, ya que cuando te sientes parte de una comunidad ayudas a alertar sobre los problemas que suceden en ella», agregó Muñoz.
Fuente Agencia Presentes
Comentarios recientes