El presidente de EE.UU., Joe Biden, va a firmar una orden ejecutiva para luchar contra la oleada sin precedentes de proyectos de ley anti-LGBTQ+ que están vomitando las legislaturas estatales republicanas.

La orden ordenará a las agencias federales que, entre otras cosas, amplíen el acceso a la asistencia sanitaria que afirme el género, ofrezcan planes de estudio inclusivos y acaben con la falta de vivienda de los homosexuales, según una hoja informativa de la Casa Blanca.

La reducción de la terapia de conversión es también una de las prioridades de la agenda. Los funcionarios trabajarán para garantizar que no se utilicen fondos federales para ofrecer esta práctica “peligrosa” y se ofrecerá más apoyo a los supervivientes de la terapia de conversión. La Comisión Federal de Comercio estudiará si la terapia de conversión es un “acto desleal o engañoso” y debe ir acompañada de advertencias para los consumidores.

“El presidente Biden siempre se enfrenta a los matones y eso es lo que hacen estas leyes y políticas extremas de MAGA: intimidan a los niños”, dijo un alto funcionario de la administración a los periodistas en una sesión informativa el miércoles (15 de junio).

“Las leyes odiosas y discriminatorias que se dirigen a los niños están fuera de la línea en la que se encuentra el pueblo estadounidense, y el presidente Biden va a utilizar su autoridad ejecutiva para proteger a los niños y a las familias”.

Este año, el Partido Republicano ha presentado cientos de proyectos de ley que atacan todo tipo de problemas, desde el acceso de los jóvenes trans a la atención médica hasta los espectáculos de drag queens, según la organización Freedom for All Americans.

En marzo se habían presentado más de 160 proyectos de ley. Y desde entonces se han presentado muchos más, dirigidos a las personas trans que utilizan los baños y participan en los deportes escolares y que impiden que los niños escuchen la palabra “gay” en las aulas.

En un esfuerzo por dominar los estados republicanos, la orden de Biden creará un nuevo comité federal para dirigir los esfuerzos de recopilación de datos para dar a los funcionarios una visión más clara de la demografía LGBTQ+ en los Estados. Una medida muy necesaria si se tiene en cuenta que hay más estadounidenses que se declaran LGBTQ+ que nunca.

Joe Biden firmará una orden ejecutiva urgente para luchar contra una serie de crueles proyectos de ley anti-LGBTQ+.

Entre otros compromisos, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) publicará nuevas orientaciones sobre cómo los estados pueden proteger mejor a las familias y los jóvenes LGBTQ+ de los ataques contra su atención sanitaria. Se eliminarán los obstáculos para que las personas LGBTQ+ accedan a la atención de salud mental, a la atención de salud reproductiva y a la prevención y el tratamiento del VIH.

El HHS también mejorará los recursos de prevención del suicidio para los jóvenes homosexuales: el 45% de los jóvenes homosexuales han considerado el suicidio, según la organización benéfica de intervención en crisis y The Trevor Project. El Servicio de Abuso de Sustancias y Salud Mental también publicará una nueva guía para que los estados ofrezcan “atención de salud mental basada en la evidencia” para los jóvenes LGBTQ+.

El Departamento de Educación estudiará las repercusiones de las leyes estatales -como el cruel proyecto de ley “No digas gay” de Florida- en los jóvenes homosexuales y elaborará políticas para garantizar que las escuelas sean un lugar seguro para ellos.

Teniendo en cuenta que las personas LGBTQ+ tienen el doble de probabilidades de quedarse sin hogar, el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano estudiará los obstáculos a los que se enfrenta esta comunidad en materia de vivienda. Los proveedores de vivienda recibirán nuevos consejos para atender a las personas LGBTQ+ y subvenciones para derribar las barreras de la vivienda.

Las personas mayores queer pronto verán aumentadas las protecciones de la “Carta de Derechos para los Adultos Mayores LGBTQI+” emitida por el HHS y serán incluidas entre las personas de “mayor necesidad social” en virtud de la Older Americans Act.

Estados Unidos sigue siendo un mosaico de estados en el que tres de cada diez personas LGBTQ+ viven en un estado que no ofrece leyes que prohíban la terapia de conversión, según el Proyecto de Avance del Movimiento. Pero el HHS trabajará para concienciar sobre esta práctica tortuosa en todo el país.

El extenso decreto se produce después de que Biden denunciara el ataque de la legislación anti-LGBTQ+ que ha dejado a las familias con “miedo y dolor”.

En una proclamación para reconocer el Mes del Orgullo en mayo, Biden volvió a pedir al Congreso que, por fin, apruebe la Equality Act – Ley de Igualdad para “consagrar las protecciones de los derechos civiles que se necesitan desde hace tiempo” y “construir un futuro mejor para todos los estadounidenses LGBTQI+”.

Si bien la ley fue aprobada sin problemas por la Cámara de Representantes en 2021, se ha estancado en el Senado desde entonces. Acumulando polvo, el proyecto de ley se enfrenta a una ardua batalla no solo para obtener el voto de la mayoría, sino también para superar el obstruccionismo.

Fuente Pink News

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La gobernadora de Alabama, Kay Ivey (Foto de Michael Wade/Icon Sportswire vía Getty Images)

Promulga el “paquete legislativo más anti-transgénero de la historia”

La gobernadora de Alabama, Kay Ivey, firma una legislación radical que prohíbe la atención médica que afirma el género para los jóvenes trans y prohíbe las discusiones sobre temas LGBT+ en las escuelas.

El gobernador republicano promulgó dos proyectos de ley controvertidos, el Proyecto de Ley 322 de la Cámara (HB 322) y el Proyecto de Ley 184 del Senado (SB 184), solo un día después de que la legislatura estatal aprobara ambas medidas.

La SB 184 tipifica como delito grave que cualquier persona brinde atención de afirmación de género, incluidos bloqueadores de la pubertad, terapia hormonal o cirugías de afirmación de género, a jóvenes trans. Cualquier persona condenada en virtud de la legislación propuesta enfrenta una sentencia de prisión de 10 años y una multa elevada de $15,000, informó ABC News .

El proyecto de ley también significa que Alabama es ahora el primer estado en los EE. UU. en imponer sanciones penales por delitos graves a los profesionales médicos que ofrecen tratamientos de afirmación de género a jóvenes trans, según la Human Rights Campaign (HRC).  El HRC también advirtió que el proyecto de ley también requeriría que el personal escolar exponga a los jóvenes trans a sus padres.

HB 322, que ha sido apodado por los defensores LGBT+ como un proyecto de ley ‘Don’t Say Gay or Trans’  (‘No digas gay o trans’),  comenzó originalmente como una legislación que prohibiría a los estudiantes trans K-12 usar baños, vestuarios y vestuarios para varias personas que se correspondan con su identidad de género.

Pero luego los legisladores republicanos enmendaron el proyecto de ley para prohibir también las discusiones en el aula sobre identidad de género u orientación sexual desde el jardín de infantes hasta el quinto grado o de una “manera que no sea apropiada para la edad”.

El proyecto de ley de Alabama va más allá de la ley “No digas gay” de Florida, que impide las discusiones sobre temas LGBT+ entre el jardín de infantes y el tercer grado. Cualquier discusión sobre temas LGBT+ en grados mayores en las aulas de Florida debe ser “apropiada para la edad”.

Ivey dijo en un comunicado después de firmar ambos proyectos de ley que estos son “desafíos muy reales que enfrentan nuestros jóvenes“, especialmente con “las presiones sociales y la cultura moderna de hoy”.

“Creo firmemente que si el buen Dios te hizo un niño, eres un niño y si te hizo una niña, eres una niña”, dijo. “Deberíamos proteger especialmente a nuestros hijos de estos medicamentos y cirugías radicales que alteran la vida cuando se encuentran en una etapa tan vulnerable de la vida”.

También declaró que “los hombres usan el baño de hombres” y “las mujeres usan el baño de mujeres” en Alabama. Ivey agregó que la HB 322 “garantizaría que las aulas de nuestras escuelas primarias permanezcan libres de cualquier tipo de conversación sexual”.

Luego afirmó que es “engañoso” llamarlo proyecto de ley “No digas gay o trans” porque asegura que a los niños pequeños no se les enseña sobre sexo. “Estamos hablando de niños de cinco años por llorar a gritos”, dijo. “Necesitamos concentrarnos en lo que importa: instrucción básica como lectura y matemáticas”.

Carmarion D Anderson-Harvey, directora estatal de Alabama para el HRC, condenó a Ivey por elegir “ganar puntos políticos con votantes radicales de extrema derecha sobre el bienestar” de los jóvenes trans y sus familias en Alabama. “La gobernadora y sus compañeros legisladores contrarios a la igualdad en el capitolio estatal aprobaron de manera imprudente un proyecto de ley que va directamente en contra de los mejores consejos de la comunidad médica y se entromete en los derechos de los padres y las familias a tomar sus propias decisiones médicas”, Anderson-Harvey dicho.

Agregó que los legisladores republicanos también han “criminalizado con éxito” la atención vital que los jóvenes trans “necesitan desesperadamente”, así como las “increíbles” profesiones médicas que ayudan a estos jóvenes “todos los días”. “Al hacerlo, han puesto en peligro el futuro de estos médicos, familias y jóvenes transgénero que están considerando cuál será su sustento en Alabama”, dijo Anderson-Harvey.

Continuó: “El paquete legislativo aprobado ayer y firmado hoy es el paquete legislativo más anti-transgénero jamás aprobado, combina elementos de leyes infames como HB 2 en Carolina del Norte, la ley ‘No digas gay o trans’ de Florida e incluso la cruel ley de Texas. acción ejecutiva de principios de este año. Qué vergüenza la gobernadora Ivey por ser tan cobarde políticamente que pone a los niños en peligro solo para servir a su propia carrera”.

BREAKING: Gov. Ivey has just signed this slate of discriminatory legislation into law.

Trans kids in Alabama — you are so loved and we’ll never stop fighting for your rights. https://t.co/CQSuLxi6dW

— Human Rights Campaign (@HRC) April 8, 2022

El Senado de Alabama aprobó tanto el HB 322 como el SB 184 con solo unas pocas horas de diferencia el jueves (7 de abril).

Según el the Montgomery Advertiser,  los grupos de derechos LGBT+ y de derechos civiles ya prometieron emprender acciones legales contra la SB 184, que entraría en vigor 30 días después de la firma de Ivey.

Sruti Swaminathan, abogada de Lambda Legal, dijo que el bufete de abogados está “preparado para hacer” una inversión para “proteger a los jóvenes transgénero, sus familias y sus médicos en Alabama”. Como tal, Swaminathan advirtió que Ivey y otros legisladores deben “preguntarse si realmente vale la pena enfocarse en la atención médica de los niños”.

La ACLU de Alabama declaró previamente en Twitter que demandaría al estado si Ivey firmaba el proyecto de ley.

BREAKING: SB 184 passes with a 66-28-1 vote. This legislation bans gender-affirming care for transgender youth aged 18 and under. It also requires school administrators to forcibly out trans students.

It will now go to Governor Kay Ivey for a signature. If signed, we will sue. pic.twitter.com/ObZoW2oCfx

— ACLU of Alabama (@ACLUAlabama) April 7, 2022

Sam Ames, director de defensa y asuntos gubernamentales del grupo de prevención del suicidio LGBT+ Trevor Project, también criticó a los legisladores de Alabama por impulsar la “agenda anti-transgénero más extrema que hemos visto hasta la fecha, todo en cuestión de horas. Estas políticas no solo son crueles e innecesarias, sino que son impopulares entre la mayoría de los estadounidenses”, continuó Ames. Criminalizar a los médicos, aislar a los jóvenes trans de sus sistemas de apoyo y estigmatizar las conversaciones sobre la identidad LGBTQ solo generará más acoso, ansiedad y riesgo de suicidio entre estos jóvenes”.

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