Una pareja gay de Castilla y León consigue convertirse en padres de acogida
Tras pasar todos los trámites y dos años de espera, Marco y Marce acogen en su hogar a dos hermanos cuya familia no está pasando un buen momento.
No han tenido ningún problema con las autoridades ni con la madre biológica.
“Todos los niños necesitan una casa, una familia”.
María José Barco
En España hay muchos niños y jóvenes que se encuentran bajo la tutela de los órganos de gobiernos autonómicos, por diversas circunstancias. Cruz Roja colabora con las administraciones públicas a través de un convenio en el programa Familias de Acogida.
A este solidario programa quisieron inscribirse Marco y Marce, una pareja homosexual de la localidad salmantina de Alba de Tormes. La Junta de Castilla y León lleva décadas trabajando junto a Cruz Roja para fomentar esta iniciativa.
No se trata de una adopción, si no de un acogimiento familiar. El objetivo es ofrecer a los menores una atención familiar que complemente o sustituya a la de sus padres biológicos. Este acogimiento se realiza durante un periodo de tiempo concreto, en el cual, la familia biológica no puede atender correctamente a los menores por determinados problemas.
Una vez pasados todos los trámites y tras una espera de dos años, a la pareja formada por Marco y Marce le han concedido el acogimiento de dos hermanos. El único requisito que pedía esta pareja era que el menor no fuera muy pequeño. Marco explica que hay familias que no quieren acoger a menores que ya hayan cumplido una cierta edad porque pueda ser más complicado convivir con ellos. Este no era su caso.
Ante el miedo y la inseguridad de ser rechazados como padres de acogida en los trámites, Marce declara que no han tenido ningún problema, ni con las autoridades ni con la madre biológica de los pequeños. Marce y Marco se muestran totalmente encantado con los dos menores que tiene a su cargo.
Marco indica que los centros de atención y de acogida que gestiona Cruz Roja son muy completos, pero que todos los niños necesitan una casa, una familia, por lo que les parece que esta iniciativa favorece la crianza y estabilidad de los menores que se encuentran en familias con problemas.
La relación de estos padres de acogida con la madre biológica es bastante buena, ya que mantienen el contacto para informarla de la evolución de sus pequeños. Marce afirma que la madre se muestra muy agradecida con ellos, pues les han podido ofrecer una vida y una educación a los niños que ella en estos momentos no puede procurarles. Durante algunos fines de semana, los menores permanecen con ella para no perder la relación.
Los padres de acogida quieren ayudar en todo lo posible a estos dos hermanos, y le brindan todo su cariño, pero son conscientes de que se trata de una acogida temporal y que tarde o temprano, los menores volverán con su familia biológica.
Fuente Cáscara Amarga
Comentarios recientes