Cinco años de cárcel por agresión homofóbica a una camarera lesbiana
Sentencian a cinco años de cárcel a un individuo por agresión homofóbica a una camarera lesbiana que sigue padeciendo los efectos secundarios del ataque dos años después
Camarera en un establecimiento de Maidstone, Reino Unidos, Lex Giggs sale a la calle a fumar un cigarrillo cuando es víctima de una brutal agresión por parte de Gregory Lees, empleado de un supermercado que, estando en estado de embriaguez, le golpea varias veces cuando ya estaba en el suelo. La agresión queda capturada por una cámara de seguridad, motivo por el que acaba de ser sentenciado a cinco años y cinco meses de cárcel. Dos años después, la víctima explica que aunque las heridas físicas se han curado, las cicatrices emocionales siguen todavía abiertas.
El acusado admite haber causado las heridas de forma intencionada. Él y su novia estaban sentados cerca de la que después sería su víctima, justo antes de la medianoche del 2 de julio de 2014, y le hizo algunas preguntas antes de insultarle, momento en el que la camarera le pidió que se fuera. Gregory Lees testificó que no recordaba exactamente lo que había sucedido, pero sí recordaba haber golpeado a Lex Giggs cuando ya estaba en el suelo.
«Me ha afectado realmente, emocional y mentalmente. Me ha hecho más duro socializar. Me ha hecho, no paranoica, pero preocupada, especialmente cuando estoy con gente borracha. Siempre he tenido confianza en mi misma pero esto ha arruinado mi autoestima. Mi familia y amigos quedaron devastados y realmente preocupados por mi. No podían creer lo que había sucedido. Su comportamiento era extraño esa noche, no hay otra forma de describirlo. Creo que fue un ataque homofóbico, por las cosas que decía. Nunca había sufrido un abuso así en mi vida», sostiene la víctima, que actualmente ya tiene 30 años de edad.
«Después de dos años de padecer ansiedad me siento aliviada de que haya sido sentenciado. Mis sentimientos de ansiedad empeoraron cuando el caso llegaba a la corte. Espero mejorar con el tiempo. Todavía no he asimilado la sentencia para saber cómo siento al respecto», explica Lex Giggs, que necesitó puntos de sutura y una operación en el Hospital Queen Victoria de East Grinstead para devolver un hueso a su sitio en su rostro, sintiendo todavía sensaciones «raras» en la mejilla. Le queda una cicatriz en la cabeza, visible a menudo al llevar el pelo corto.
Desde el suceso ha trabajado como cuidadora para personas con demencia y Alzheimer, comenzando ahora a trabajar como tutora, ayudando en la educación de adultos que buscan volver a trabajar explicando que le gusta «ayudar a la gente. Me gustaría dar las gracias a mi familia y amigos por todo su apoyo durante los últimos dos años y a mi novia Patry Fernandez por ser una increíble persona que me ha devuelto la confianza en mi misma».
Fuente Agencias/ UniversoGay
Comentarios recientes