Brasil retira proyecto sobre la discriminación sexual de la Asamblea de la OEA.
Eduardo dos Santos, vicecanciller brasileño, omitió el tema de la no discriminación a grupos gays y lésbicos que su Gobierno planteó en principio y que generó un debate polarizado en Paraguay, donde se llevó a cabo la 44ª Asamblea General de la OEA.
Dos Santos se limitó a expresar que “la inclusión social se traduce en una mayor estabilidad social” para todos los países de la región. Por ello, felicitó al Paraguay por haber elegido su lema de la 44ª Asamblea General de la OEA.
Precisamente este punto traído a la Asamblea de la mano de Brasil, generó un intenso debate entre los defensores de la familia compuesta por hombre y mujer como la base de la sociedad y de la defensa de la vida desde la concepción, y quienes apoyan otro tipo de uniones, y abogan por la despenalización del aborto.
El debate llegó a tal punto que el propio Gobierno paraguayo sentó postura a favor de la familia y de la vida, primeramente a través del canciller, Eladio Loizaga, y luego con la postura del propio presidente de la República, Horacio Cartes, y una declaración del mismo Congreso.
Esta abierta postura paraguaya generó resquemor con el Gobierno brasileño y como consecuencia, Itamaraty no envió a su ministro de Relaciones Exteriores, Luiz Figueiredo, sino al vicecanciller Dos Santos, restando jerarquía a su representación.
Eliminar barreras
El proyecto, entre otros puntos, hablaba de “instar a los Estados Miembros a que dentro de los parámetros de las instituciones jurídicas de sus sistemas, eliminen, allí donde existan, las barreras que enfrentan las lesbianas, los gays y las personas bisexuales, trans e intersex (LGTBI) en el acceso equitativo a la participación política y otros ámbitos de la vida pública, así como evitar interferencias en su vida privada”.
También hablaba de “solicitar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a que “continúe la preparación de un estudio sobre las leyes y disposiciones vigentes en los Estados Miembros de la OEA que limiten los derechos humanos de las personas como consecuencia de su orientación sexual o identidad o expresión de género y que, con base en ese estudio, elabore una guía con miras a estimular la despenalización de la homosexualidad y de prácticas relacionadas a la identidad o expresión de género”.
Uruguay sí toca el tema. Por su parte, el canciller uruguayo, Luis Almagro, pidió que se apruebe la resolución promovida por Brasil.
El diplomático recalcó que son necesarias políticas y programas que tiendan “a eliminar la discriminación por motivos de orientación sexual o género”. “Debemos educar en la diversidad para que las personas conozcan su entorno y respeten los derechos de todos”, añadió. Argentina también se refirió a la polémica pidiendo que se elimine la exclusión social.
Encontrado en Sentido G.
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