Torneo contra el matrimonio homosexual en el polideportivo de La Elipa (Madrid)
Asistentes al torneo fascista y homofóbico del 28 de junio. Imagen cedida por UGT
“Organizaron un evento contra los homosexuales cuando al día siguiente empezaba el Orgullo Gay; era una provocación”, denuncia UGT
La Policía les impidió seguir vendiendo bebidas alcohólicas y utilizando megafonía, pero permitió que el evento continuase
En 2013 también se celebró este evento en el polideportivo de La Elipa.
Cuando sólo quedaba una semana para que Madrid acogiera el Orgullo LGTB, envuelto en polémica por prohibir incluso uso de megafonía en el pregón, sin contar la supresión de casi todos los escenarios (Chueca, Pelayo, mercado de Fuencarral…) para aniquilar y ahogar las fiestas que más turistas atrae a la capital… El Ayuntamiento de Madrid permitió en sus instalaciones deportivas de La Elipa la organización de un torneo de fútbol sala homófobo.
Bajo el lema “Por la familia y contra el matrimonio homosexual”, el colectivo La España en Marcha, que engloba grupos como el Movimiento Católico Español y Acción Juvenil Española, hizo del pabellón deportivo un atril desde el que proclamaron “su defensa del orden moral” el pasado 28 de junio, según ha denunciado UGT y que recoge Eldiario.es.
Unas 50 personas de la plataforma ultraderechista España en Marcha organizaron el sábado 28 de junio un partido “por la familia” en el polideportivo de La Elipa de Madrid. El grupo colocó banderas preconstitucionales como la cruz celta o el águila imperial en el recinto, denuncia el sindicato UGT, que detectó la intención del grupo de celebrar un torneo de fútbol en favor del matrimonio “oficial” y en contra de los enlaces homosexuales.
Coincidiendo con el día del Orgullo Gay, el pasado 28 de junio exhibieron símbolos fascistas en el polideportivo de La Elipa. UGT reconoce que el Consistorio no conocía la naturaleza del acto, pero denuncia que es la segunda vez que ocurre
Cubrieron las paredes del polideportivo municipal de banderas fascistas
Alquilaron una pista del polideportivo de La Elipa para celebrar un torneo, pero olvidaron mencionar que era un evento homofóbico, que además exhibirían símbolos fascistas y que venderían bebidas alcohólicas.
El pasado 28 de junio, día del Orgullo Gay, medio centenar de ultraderechistas -muchos de ellos menores de edad- celebraron un torneo “Por la Familia y contra el matrimonio homosexual” en un espacio alquilado al Ayuntamiento de Madrid, en el que utilizaron megafonía y exhibieron banderas de Falange, Bases Autónomas y Alianza Nacional. Según señala el sindicato, las instalaciones se destinaron a este torneo dos horas, tiempo durante el cual se revistió el pabellón con banderas de la Falange Española, cruces celtas, banderas franquistas y todo tipo de simbología fascista que incluso fue comercializada en varios tenderetes dispuestos para la ocasión.
“Lo más grave es organizar un evento en contra de los homosexuales, cuando el día siguiente empezaba el Orgullo Gay en Madrid; era una provocación”, aseguran a este diario desde UGT. “En un primer momento pusieron un tenderete con simbología fascista, y en otro bebidas alcohólicas. Está prohibido vender bebidas alcohólicas sin permiso, pero también exhibir símbolos. Pusieron una bandera preconstitucional con el aguilucho, y otra con la cruz celta, cuando está totalmente prohibido por la normativa municipal exhibir estos símbolos”, aseguran.
La policía municipal estuvo en el pabellón, alquilado a nombre de un particular, durante hora y media y constató que había banderas de Falange, Bases Autónomas y Alianza Nacional, partido de extrema derecha y en el que se integran algunos de los participantes en el asalto a la librería Blanquerna en Madrid el pasado año, con motivo de la festividad catalana de la Diada. Su líder, Pedro Pablo Peña, se encontraba entre los asistentes al acto, según recoge Acción Juvenil Española en su blog.
“Lo primero que se hizo fue retirar la megafonía, desde la que se estaban lanzando consignas despectivas hacia los homosexuales muy desagradables”, explica Soler. La patrulla de agentes municipales solicitó apoyo a la Policía Nacional que ordenó la retirada de los tenderetes, aunque según UGT, las enseñas y el resto de parafernalia aguantaron colgadas. “La normativa municipal prohíbe expresamente que cualquier simbología política sea utilizada en las instalaciones deportivas municipales, y aquí vemos claro que hay un doble rasero”, denuncia Soler, que recuerda un episodio en el polideportivo de Arganzuela la tarde del pasado día 18 de junio, una jornada antes de la coronación del Rey, Felipe VI. “Otro sindicato colgó una pancarta en contra de la monarquía y a favor de la república y rapidamente acudió la Policía Nacional a retirarlo, como es su deber, como ocurriría si colgásemos un cartel por ejemplo en defensa de los servicios públicos”, señala. “Entendemos que por lo menos la persona que alquiló las instalaciones debe ser sancionada por hacer un uso fraudulento de ellas”.
La Unión General de Trabajadores ha exigido al Ayuntamiento de Ana Botella que tome medidas por lo ocurrido, pero reconoce que el Consistorio no conocía la verdadera naturaleza del evento, ya que a menudo estos espacios se alquilan de forma nominativa, y los ultraderechistas no explicaron sus verdaderos propósitos, aunque sí publicitaron el torneo homofóbico en distintas webs.
Sin embargo, también denuncian que no es la primera vez que hechos similares tienen lugar, “sin que el Consistorio haya hecho nada por evitarlo”. “El primer año no pusieron tenderetes, pero sí banderitas. Lo peor es que a 30 metros hay un campo de béisbol, en el que en ese momento había muchos ciudadanos inmigrantes, podría haberse liado más”, aseguran. El torneo se celebra por segundo año consecutivo y con el mismo motivo. “El ayuntamiento es consciente de que el año pasado también se celebró el acto, pero al ser un particular quien alquiló las pistas el acto resultó indetectable hasta el momento de su celebración. El año pasado fue mucho más discreto, sin megafonía, sin tenderetes… La tolerancia con este acto lo ha hecho crecer”, valora Soler, que destaca que no hubo episodios violentos al margen de las proclamas lanzadas por el megáfono.
UGT se muestra también muy crítica por la presencia de menores en el evento -como se aprecia en las imágenes-, “un adoctrinamiento al odio bastante lamentable”.
El portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento, Jaime Lissavetzky, ha condenado el acto: “Este torneo nunca debió celebrarse. Madrid no es esto. La inmensa mayoría de los madrileños nos avergonzamos de este tipo de manifestaciones y la casa de todos, como es el polideportivo de La Elipa, no puede ser sede de un acto que, además de xenófobo, podría llegar ser ilegal”. Lissavetzky pide explicaciones al Ayuntamiento y que se tomen las medidas necesarias para que “algo así no vuelva a suceder”.
El Ayuntamiento estudia imponer sanciones
El Consistorio de Ana Botella está a la espera de recibir las actas policiales para decidir si sanciona o no a la persona que alquiló este espacio.
Los ultraderechistas alquilaron la pista durante dos horas, el pasado 28 de junio. Cuando el responsable del centro se percató del uso que estaban haciendo de las instalaciones llamó al 112, por lo que se personaron en el polideportivo varios agentes de la Policía Municipal y Nacional.
Estos exigieron la retirada de la megafonía y del tenderete con bebidas alcohólicas, pero permitieron que el evento continuara, a pesar de la exhibición de símbolos fascistas.
Fuente Público, El País, El Mundo, Madridiario
Comentarios recientes