Cancelan el estreno en Moscú del ballet “Nuréyev” por considerarlo “propaganda homosexual”
El ballet Nuréyev, basado en la vida del bailarín Rudolf Nuréyev, ve cancelado su estreno de forma fulminante y todo apunta a que al Ministerio de Cultura ruso no le agradaba que se representara sin tapujos la homosexualidad del bailarín.
El teatro Bolshói asegura que la cancelación se debe a que la obra no está lista para su estreno, algo que el director y autor niega rotundamente.
Rudolf Nuréyev fue una de las grandes figuras del ballet ruso. Nacido en 1938, Nuréyev huyó de la Unión Soviéta en 1961 y vivió su homosexualidad con relativa libertad en Europa hasta su muerte en 1992. En el Teatro Bolshói de Moscú estaba todo preparado para estrenar hoy martes la obra de ballet Nuréyev basada en la vida del bailarín, pero parece que Rusia se quedará sin disfrutar de la obra porque todo a punta a que las autoridades consideran que, evidentemente, la representación de la vida de un bailarín homosexual hace propaganda homosexual.
Y, como todos sabemos, la “propaganda” homosexual está prohibida en Rusia desde 2013 gracias a una ley que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acaba de decir que es discriminatoria y fomenta la homofobia. Esa ley, eso sí, prohíbe la “propaganda homosexual” entre menores; así que salvo que el teatro dejara entrar a personas de menos de 18 años no estarían incumpliéndola. Pero que te crees tú que eso va a impedir a los gobernantes rusos ser homófobos.
Como realmente no se incumple ninguna ley, es evidente que ningún político ruso ha salido a decir que se ha cancelado la obra por ese motivo. Aunque el periódico Meduza señala a que la decisión se ha tomado desde el despacho del Ministro de Cultura ruso, Vladimir Medinsky, éste insiste en que el motivo no ha sido que en la obra se describan escenas homosexuales, que el ministerio “no interfiere en el repertorio” del teatro ni “se dedica a censurar“; aunque apoya totalmente la decisión porque le parece “equilibrada y correcta“.
Desde el teatro su director, Vladímir Urin, ha justificado la cancelación del estreno y el retraso del mismo hasta el año que viene alegando que la obra no estaba acabada y no podía mostrarse aún al público e insistió en que la cancelación fue únicamente por “razones artísticas“. El director y escritor de la obra, Kiril Serébrennikov, ha negado la mayor y ha asegurado que el espectáculo está listo para estrenarse y que la decisión se ha tomado sin haberla consultado con él. Varios artistas de la obra han respaldado la versión de Serébrennikov y confirman que el ballet está totalmente listo para ser estrenado.
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Algunos periodistas rusos señalan que todo puede deberse en realidad a una campaña de acoso del gobierno ruso a Serébrennikov, que también dirige el teatro Gógol que está envuelto en la polémica porque una empresa patrocinadora ha sido acusada de malversación de fondos. Pero lo cierto es que en ese caso Serébrennikov está llamado como testigo y no como acusado.
Lo cierto es que en la obra hay un segmento en el que los artistas bailan desnudos frente a un retrato (también desnudo) de Nuréyev y el eje central del argumento es la relación de Nuréyev con el bailarín danés Erick Bruhn, con el que mantuvo un romance durante varias décadas. Aunque el ministro Medinsky asegure que no se trata de un acto de censura, su viceministro declaró hace poco sobre este ballet que “la propaganda de las relaciones sexuales no tradicionales es inaceptable“.
Fuente | El País, vía EstoyBailando
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