Polémica por la “máquina para detectar putos” en show de la TV argentina.
Alejandro Fantino y Coco Sily, conductores del programa “Animales Sueltos” donde se instauró la llamada “máquina para detectar putos”.
Fuente: La Nación, Diario Veloz, Prensa FALGBT, vía SentidoG:
Marcó un pico de rating. Sin embargo, el regreso de Alejandro Fantino a la tevé argentina con Animales Sueltos desató la controversia. Anteayer, Fernando Coco Sily, en su personaje del “macho argentino” instaló en el estudio un aparato al que llamó “la máquina de detectar putos”. En esa nueva sección, el invitado -esta vez, el ex boxeador Jorge Roña Castro– se coloca un casco que, en función de sus respuestas, hace que la pantalla cambie de color. Rosa significa homosexual y verde, “macho”.
Si bien el tema instaló la polémica en las redes sociales, distintos organismos oficiales y referentes de la lucha contra la discriminación relativizaron el impacto de la actuación de Sily y destacaron que el actor siempre apoyó las causas en contra de la homofobia.
Por estas horas, el video lo analiza el Observatorio de Medios del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), y su interventor, Pedro Mouratian, prefirió esperar el dictamen para pronunciarse.
En su guía de “Buenas prácticas en la comunicación”, el organismo apunta: “‘Puto’ es utilizado como un insulto íntimamente asociado con la debilidad y la falta de aptitudes para el desempeño correcto. Queda en evidencia que es una mirada despreciativa sobre las personas según su orientación sexual”.
César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) relativizó el tema: “Sily fue uno de los primeros que se acercó a la CHA. Nunca fue homofóbico. El personaje que desempeña lo es. Si se plantea como una ironía, no es tan grave. La farándula tiene sus códigos. Sin embargo, preferiría que la máquina detecte machos golpeadores, para luchar contra ese estereotipo“, dijo.
La ex legisladora y ex titular del INADI María José Lubertino criticó el uso de los colores de la máquina de Sily, aunque también apuntó que al ser humor, debe analizarse desde otro lugar. “En el humor hay que tener un criterio amplio. Si no, estaríamos censurando. Primero, la libertad de expresión. Pero también hay que analizar cómo impacta en la sociedad. No importa si un personaje del mundo gay se presta a esa broma y no se ofende. Lo grave es lo que sucede en el mundo exterior con los millones de personas que padecen discriminación y que al día siguiente le van a hacer esos chistes o esas burlas. En ese sentido, estos personajes pueden tener un impacto negativo”, dijo Lubertino.
Por su parte, la periodista Mariana Vaccaro en un artículo publicado en la página de noticias Diario Veloz, indicó respecto a la máquina en cuestión que “lo primero que recordé fue una foto donde una médica de los años 40 sostenía una especie de tabla con colores y se lo acercaba al ojo de un niño de unos 7 años para comparar los tonos y ‘detectar’ la ‘raza’ del nene. La imagen era parte de una muestra en un museo de Berlín sobre la ‘detección’ de judíos y gitanos en la Alemania Nazi“.
Vaccaro se mostró preocupada por el hecho de que “bajo la modalidad de ‘chiste’ se puede decir cualquier cosa. Ya sea seriamente o entre carcajadas, el mensaje con tono homofóbico se masifica. El estereotipo de ‘macho’ que domina a la mujer y que odia a los gays se alimenta”.
La periodista también recordó los casos de Damián Marsero, golpeado por la Policía en La Pampa en febrero de este año por ser gay y de Pedro Robledo quien fue atacado a golpes hasta quedar inconsciente en una fiesta en San Isidro en marzo de 2013, al grito de “putos de mierda, váyanse de acá”.
Por su parte, la Federación Argentina LGBT (FALGBT) expresó su repudio a la sección del programa de Fantino, a la que calificaron de “altamente discriminatoria“. “Incita al odio y la violencia al repetir una y otra vez conductas asignadas por suposición social a las personas LGBT, y constituye una nueva agresión a nuestro colectivo, ahora en televisión masiva”, agregó la organización en un comunicado en el cual instan a la producción de Animales Sueltos a retirar la sección y “emprender una profunda reflexión sobre la discriminación, sus consecuencias, y el rol social de las y los comunicadores sociales”.
Al respecto Esteban Paulón, presidente de la FALGBT expresó lo siguiente: “Lamentamos profundamente que esta sección haya tenido aire en Animales Sueltos, un programa que en otros momentos logra espacios intimistas y que ha sabido dar espacio a las expresiones de la diversidad. La ‘máquina de detectar putos’ no contribuye en ese sentido y es una agresión innecesaria hacia nuestro colectivo“. “Sin dudas este tipo de ‘humor’ no tiene nada que ver con el país en que queremos vivir; con espacio para todas y todos y respetuoso de la diversidad y su riqueza”, concluyó el activista.
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