Archivo

Entradas Etiquetadas ‘Jesús García Burillo’

FECyLGTB+ considera la Universidad Católica de Ávila no puede formar en delitos de odio a los policías

Viernes, 7 de octubre de 2016
Comentarios desactivados en FECyLGTB+ considera la Universidad Católica de Ávila no puede formar en delitos de odio a los policías

fecylgtb-logoLa formación contra delitos de odio es fundamental para garantizar la seguridad de las minorías.

La máxima autoridad de la Universidad Católica de Ávila es Jesús García Burillo, que considera que la homosexualidad no es tan legitima como la heterosexualidad.

FECyLGTB+ pide a la Junta de Castilla y León que apoye a su Universidad Pública de Salamanca, como garantía de calidad e imparcialidad científica en la docencia.

 La FECyLGTB+, Federacion Castellana y Leonesa de Lesbianas, Gays, Transexuales, Bisexuales y más, considera preocupante para la protección de las minorias que una Universidad católica asuma la docencia de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, de los funcionarios que nos protegen a todas y todos. Una institucion con una ideología religiosa determinada, contraria a la igualdad de Lesbianas, Gays, Transexuales, Bisexuales y más, no puede impartir una docencia de calidad, imparcial y científica, que garantice la formación que necesitan los policias para identificar, comprender y proteger a las minorías frente a los delitos de odio.

Queremos recordar que la Universidad Católica de Ávila está encabezada jerarquicamente por el Obispo de Ávila, que considera la homosexualidad como menos legítima que la heterosexualidad llegando a afirmar estar alarmado de que con la aprobación del matrimonio igualitario “la homosexualidad se presenta como una opción tan legítima como la heterosexual”. A juicio de FECyLGTB+, una institución encabezada jerarquicamente por alguien que afirma que la homosexualidad no es tan legitima como la heterosexualidad, dificilmente podrá impartir la formación necesaria para los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado en materia de delitos de odio, como recoge el Protocolo de Actuacion para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para los delitos de Odio y Conductas que Vulneran las Normas Legales sobre Discriminación , aprobado por el ministerio del interior.

Queremos recordar que en los dos últimos años, el numero de delitos de odio, especialmente las agresiones a la diversidad sexual, no han hecho más que aumentar en España. Es necesario mejorar la implementación del protocolo y promover nuevas medidas contra las agresiones a la diversidad sexual, pero esta concesión a una Universidad con una ideología que no respeta dicha diversidad nos genera, como colectivo, gran inquietud, pues tememos que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, lejos de avanzar para protegernos de los delitos de odio, sean formados en la creencia de que la homosexualidad no es tan legitima como la heterosexualidad, con las consecuencias que ello puede tener para nuestra seguridad.

Para Ignacio Paredero, Presidente de FECyLGTB+ “Una Universidad Católica no puede formar a la policía que nos protege a todos, incluso a los que dicha iglesia considera ilegítimos. Como colectivo LGTB+, que los policías que nos protegen reciban formación de una Universidad encabezada por quien nos considera ilegítimos, sencillamente, nos da miedo”.

Pepa Tascón, vicepresidenta de FECyLGTB+ ha afirmado que “España ya no es que sea aconfesional, es que es multicultural y está poblada por habitantes de diferentes religiones y creencias. Confiamos en que se inste a la Junta de Castilla y León a que la formación de nuestra Policía, la de todos, vuelva a la Universidad pública, neutral y aconfesional”.

Fuente FECyLGTB+

General , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Homosexuales, el paradigma de la “maldad” al que se aferra la Iglesia católica

Viernes, 28 de febrero de 2014
Comentarios desactivados en Homosexuales, el paradigma de la “maldad” al que se aferra la Iglesia católica

350-homosexuales-el-paradigma-de-la-maldad-al-que-se-aferra-la-iglesia-catolicaAntonio Gala y una reflexión sobre la Iglesia

Para muchos prelados, los gays siguen siendo sinónimo de “deficiencia”, “anormalidad”, “corrupción moral”, “patología”

Algunos incluso los vinculan directamente con la pederastia o justifican enfermedades como “divina providencia

Sebastián, cardenal: “El señalar a un homosexual una deficiencia no es una ofensa, es una ayuda porque muchos casos se pueden recuperar y normalizar”

Reig Pla prologó un libro que considera la homosexualidad una “patología” que se puede “tratar” y “combatir”

Eduardo Sánchez

Enfermos, anormales, corrompedores, desordenados, aniquiladores de la humanidad, responsables de pandemias y crisis económicas, propagadores de enfermedades, pederastas… Los homosexuales siguen siendo el colectivo -como antaño fueron las mujeres- hacia el que los prelados católicos dirigen sus báculos más envenenados a la mínima oportunidad.

El último en sumarse a esta legión de sotanas homófobas es el recién nombrado cardenal Fernando Sebastián, quien sostuvo este fin de semana, en una entrevista en el diario Sur, que la homosexualidad “es una manera deficiente de manifestar la sexualidad, porque ésta tiene una estructura y un fin, que es el de la procreación”. Sebastián, de 84 años, llega a comparar la homosexualidad con la enfermedad de hipertensión que él padece. “En nuestro cuerpo tenemos muchas deficiencias. Yo tengo hipertensión, ¿me voy a enfadar porque me lo digan? […] El señalar a un homosexual una deficiencia no es una ofensa, es una ayuda porque muchos casos de homosexualidad se pueden recuperar y normalizar con un tratamiento adecuado. No es ofensa, es estima. Cuando una persona tiene un defecto, el buen amigo es el que se lo dice”.

Parece que las palabras del Papa Francisco sobre los homosexuales –“¿quién soy yo para juzgarles?”– aún no han calado entre muchos pastores de su rebaño. Su predecesor en la silla de Pedro, Benedicto XVI, dedicó gran parte de su papado a atacar el amor entre personas del mismo sexo. De ellos dijo que van “en contra de lo que Dios ha querido originalmente”; que la homosexualidad supone “una destrucción del trabajo de Dios” o que la aprobación en algunos países del matrimonio gay socava “el porvenir mismo de la humanidad”. Su mano derecha en el Vaticano, Tarcisio Bertone, fue un paso más allá y directamente relacionó homosexualidad y abusos sexuales a menores.

Precisamente el matrimonio homosexual y los numerosos escándalos de pederastia que se van conociendo desde hace años dentro de la Iglesia Católica han sido aprovechados por curas, obispos, arzobispos y cardenales para atacar la homosexualidad.

Para obispos como el de Ávila, Jesús García Burillo, la ley aprobada en 2005 por el Gobierno de Zapatero ponía “en peligro la educación afectiva de nuestros jóvenes”; para el de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, esta reforma del Código Civil acarreaba un “notable aumento de hijos con graves perturbaciones de su personalidad” y el “desarrollo de un clima que termina con frecuencia en violencia”. El ex secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, sostuvo que esta legislación fue una “acción de satanás” -además de considerar “desordenada” la conducta homosexual-, y su jefe directo, el cardenal arzobispo de Madrid Antonio María Rouco Varela, que la norma atentaba contra la “razón humana”. Ambos encabezaron manifestaciones contra la decisión de llamar matrimonio a las uniones homosexuales y fueron muy combativos contra esta y otras políticas sociales del Ejecutivo socialista.

Pero, sin duda, el prelado que más se ha significado en los últimos años por su clara hostilidad hacia los homosexuales es el obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla. En abril de 2012, aprovechó una homilía retransmitida por Televisión Española para lanzar un mensaje a aquellos que “llevados por tantas ideologías que acaban por no orientar bien lo que es la sexualidad humana, piensan ya desde niños que tienen atracción hacia las personas de su mismo sexo”. Reig Pla aseguraba que para comprobar esta orientación, estas personas “a veces se corrompen y se prostituyen. O van a clubes nocturnos de hombres [donde] encuentran el infierno”.

El obispo, que preside la subcomisión episcopal para la Familia, también ha defendido que muchos menores “pueden dudar de su condición e identidad sexual […] llevados por una ideología” que se imparte “en las escuelas”. No dudó tampoco en presentar el verano pasado un “manual”Amar en la diferenciaque considera la homosexualidad una “patología” y “una gravísima vulnerabilidad, que por el bien de la persona y de su entorno debemos tratar y combatir”, según expuso el propio obispo alcalaíno en el prólogo de este libro.

La patología, la enfermedad, la contra natura… Ese es otro de los leitmotiv a los que recurre la Iglesia para atacar a los homosexuales desde la época del Nacionalcatolicismo. Durante el franquismo, desde los púlpitos, las escuelas, los medios de comunicación, incluso desde sus asientos de procuradores en Cortes, las jerarquías católicas no cejaron en su empeño de colgarle a los homosexuales la cruz de “peligrosos sociales”, “corruptores de la moral” o “desviados” a los que había que “reconducir” a través de una supuesta “rehabilitación social” que consistía en años de prisión y en ser utilizados como cobayas humanas para experimentos de afamados psiquiatras.

 Desde la década de los ochenta, la Iglesia se encargó de estigmatizar a los homosexuales con el sida -hoy todavía hay quien como el arzobispo belga André-Joseph Leonard considera esta enfermedad como un “acto de justicia”-. En la actualidad, los prelados españoles suelen ser más sutiles y se mueven entre la misericordiosa “compasión” con quien “padece” la homosexualidad, como sostuvo el obispo de Segovia, Ángel Rubio, y aquellos que como su homólogo de Córdoba, Demetrio Fernández, creen que hay una conspiración de la UNESCO “para hacer homosexual a la mitad de la población mundial”. Incluso desde algunas cavernas mediáticas se podía escuchar hace pocos días cómo un sacerdote, apologista del franquismo, afirmaba públicamente que el cáncer que padece el concejal socialista Pedro Zerolo -muy activo en reconocer los derechos de los homosexuales- podía ser un “castigo de la divina providencia, que intenta ejemplarizar”. Todo muy cristiano.

Leer Más

Fuente ZoomNews

Homofobia/ Transfobia., Iglesia Católica , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Recordatorio

Cristianos Gays es un blog sin fines comerciales ni empresariales. Todos los contenidos tienen la finalidad de compartir, noticias, reflexiones y experiencias respecto a diversos temas que busquen la unión de Espiritualidad y Orientación o identidad sexual. Los administradores no se hacen responsables de las conclusiones extraídas personalmente por los usuarios a partir de los textos incluidos en cada una de las entradas de este blog.

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Por supuesto, a petición de los autores, se eliminará el contenido en cuestión inmediatamente o se añadirá un enlace. Este sitio no tiene fines comerciales ni empresariales, es gratuito y no genera ingresos de ningún tipo.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un espacio de información y encuentro. La información puede contener errores e imprecisiones.

Los comentarios del blog estarán sujetos a moderación y aparecerán publicados una vez que los responsables del blog los haya aprobado, reservándose el derecho de suprimirlos en caso de incluir contenidos difamatorios, que contengan insultos, que se consideren racistas o discriminatorios, que resulten obscenos u ofensivos, en particular comentarios que puedan vulnerar derechos fundamentales y libertades públicas o que atenten contra el derecho al honor. Asimismo, se suprimirá aquellos comentarios que contengan “spam” o publicidad, así como cualquier comentario que no guarde relación con el tema de la entrada publicada. no se hace responsable de los contenidos, enlaces, comentarios, expresiones y opiniones vertidas por los usuarios del blog y publicados en el mismo, ni garantiza la veracidad de los mismos. El usuario es siempre el responsable de los comentarios publicados.

Cualquier usuario del blog puede ejercitar el derecho a rectificación o eliminación de un comentario hecho por él mismo, para lo cual basta con enviar la solicitud respectiva por correo electrónico al autor de este blog, quien accederá a sus deseos a la brevedad posible.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.