La cantante está aquí para “alabar y enfurecer” en un género que necesita escuchar más voces LGBTQ+.

Por Mey Rude

Una música cristiana ha tenido dos álbumes número 1 en el último año, pero ha recibido casi cero avisos en la prensa y aún menos reproducción en la radio cristiana. Su nombre es Semler, también conocida como Grace Baldridge, de 30 años e hija de un ex pastor   de Carolina del Sur cuya composición campechana, riffs de guitarra punk-country y un mensaje resonante de dolor y esperanza llevaron a sus EP de 2021, Preacher’s Kid y Late Bloomer, al primer puesto en las listas cristianas de iTunes.

Baldridge (todos pronombres; “Realmente no tengo preferencia”) creció escuchando CCM, o música cristiana contemporánea, con bandas como Relient K, Thousand Foot Krutch, Stellar Kart, Switchfoot y Audio Adrenaline entre sus favoritas.

Pero si le hubieras dicho que algún día encabezaría la misma tabla en la que aparecían estos grandes nombres, no te habría creído. Como cristiana queer, pensó que si iba a escribir y cantar CCM, significaría que estaba escondiendo quién era y participando en una industria que no quiere que ella exista.

Baldridge supo desde temprana edad que no era como otras niñas en el patio de recreo. Le gustaba fingir ser el esposo, odiaba el cabello largo y hacía “rabietas bíblicas” cuando lo obligaban a usar vestidos de iglesia. Afortunadamente, sus padres estaban muy abiertos a dejarlo probar cosas nuevas y descubrir quién quería ser. ¡Las cosas realmente encajaron cuando vio el clásico Moulin Rouge de Baz Luhrmann de 2001! “Nicole Kidman, ¿y cuando baja en el columpio de diamantes? Yo estaba como, Oh, soy gay”, se ríe.

Saber que era diferente no le hizo perder la fe. En cambio, el nuevo conocimiento la liberó. “Creo que una vez que acepté mi homosexualidad no como una carga, sino como un don divino, se me abrió todo lo que tenía que ver con la forma de entender la divinidad”, dice. “Y todas esas limitaciones tan rígidas y autoritarias que tenía sobre cómo debía ser la relación de una persona con Dios se abrieron de par en par”.

“Me ha traído una mayor sensación de paz, una mayor sensación de asombro cuando me rindo al misterio de Dios y no al ‘Papá del cielo’ en el que el mundo ha condensado a Dios”, continúan. “Permitirme tener espacio para la duda en realidad me crea espacio para creer”.

También le ha permitido ser su mejor versión, lo que recientemente incluyó afeitarse la cabeza con un corte de pelo rubio blanquecino, algo que ha sido una especie de marcador visual de “punto de no retorno” para algunos de sus conocidos cristianos. El cambio en su apariencia es algo más que superficial. “Sé que podría haberme presentado de una manera que hiciera que [los cristianos] se sintieran cómodos, pero era la versión menos saludable y más tóxica de mí mismo que he sido nunca cuando tenía el aspecto que tú querías que tuviera”, dicen. “Y me conocen ahora, y sé que visualmente seré chocante para algunos de ustedes y que desafiaré su percepción de este binario que se les ha asignado, pero pueden conocerme ahora y ver que soy la más sana y completa que he sido nunca y que hay una correlación allí”.

“Por favor, comprenda que la divinidad interior es lo que está experimentando hoy”, continúa Baldridge. “La razón por la que puedo escribir esta música, la razón por la que puedo presentarme ante mi familia, mi esposa, mi hermano, es porque ya no estoy agobiado por ese sistema regresivo en el que nací. Sé que parece como, ‘Tienes un tatuaje de cuchillo’. Te has caído’, pero en realidad es, ‘No, no lo he hecho. Me encontré a mi mismo. ya no tropiezo’”.

Aún así, a pesar de sus dos álbumes que encabezaron las listas de éxitos y de que su fe era más fuerte que nunca, la única pieza de la prensa cristiana convencional que recibió fue cuando The Gospel Coalition, una red editorial religiosa, llamó a su álbum Preacher’s Kid una “intrusión” en las listas cristianas. .

“Creo que es muy, muy triste que haya todo un género de música en el que las personas supuestamente están sirviendo a su fe y, sin embargo, no les informa que sean muy audaces con respecto a los derechos humanos”, dice Baldridge. Le encanta etiquetar a artistas de CCM como TobyMac en las redes sociales y pedirles que digan la simple frase “derechos de los homosexuales”. Ninguno muerde.

“Eso es una locura para mí, que no defenderías los derechos humanos y, sin embargo, dirías: ‘Creo en la divinidad inherente de cada persona. Toda persona es portadora de una imagen. Y también, es importante que no diga nada sobre los derechos de esta comunidad’. ¿Qué? Eso es absurdo”, añaden.

No ven que eso termine pronto, pero aún así, les gustaría al menos tener un asiento en la mesa. “No creo que haga música para cada persona”, dicen. “Solo digo que hago música para una comunidad que ha sido rechazada por el establecimiento de la iglesia, e incluyo a la industria de la música cristiana como parte de eso. Y solo quiero que la gente que pueda identificarse encuentre mi música y la pase bien”.

Hay algunos en la industria que han tendido la mano, como Jennifer Knapp, una antigua artista de CCM que salió del armario como lesbiana en 2010. “Ha sido muy amable y me ha apoyado”, dice Baldridge. Otro es Kevin Max, antiguo miembro de la legendaria banda de rock cristiano DC Talk. Lo que más le ha animado es Relient K, uno de los pocos artistas de CCM que ha pasado al éxito general, que la llevará de gira este año. “Me han apoyado mucho. Está más allá”, dice.

Y Trey Pearson, el ex vocalista de Everyday Sunday, que causó sensación en la música cristiana cuando salió del armario como gay en 2016, reconoce a Semler como una figura revolucionaria y “bellamente subversiva” en el género. La pareja colaboró recientemente en la grabación de “Hey Jesus” de Pearson, una carta de amor a las personas LGBTQ+ de la fe. “Es un mundo nuevo, y ella está aprovechando la oportunidad para ayudar a la gente a progresar hacia un lugar de aceptación y amor”, dice Pearson.

Pero incluso si Semler nunca llega a ser acogida en la industria de la música cristiana convencional, va a seguir con su misión de “alabanza y rabia”, una frase que utiliza a menudo y que incluye en la mercancía. “Pienso en la alabanza, pienso en la alegría desenfrenada, en esos momentos en los que dices: ‘Estar vivo es increíble, no puedo creer que pueda hacer esto’“, dice. “Y la parte de la rabia… cuando miras el mundo como divinamente creado, y luego ves muchas cosas que están sucediendo y que te rompen el corazón, deberías sentir rabia y enfado”.

Su próximo proyecto, un EP llamado Stages of a Breakdown, saldrá en abril y fue escrito sobre una reciente pelea que tuvo con el mismo amigo que inspiró su éxito “Jesus From Texas“. El amigo volvió a acercarse después de esa canción, “y lo volvimos a hacer, supongo”, dice Baldridge. Necesitaban procesar lo sucedido, así que escribieron canciones como catarsis para ella y para los demás.

“No tengo respuestas, pero si alguien puede escuchar una expresión mía o una música mía y siente cierto grado de confort, creo que eso es todo lo que puedes esperar como artista”, dice.

Fuente OUT

Cristianismo (Iglesias), General, Historia LGTBI, Música Grace Baldridge