Las imágenes de unos agentes de seguridad golpeando a dos chicas por llevar chapas arco iris cuando se dirigen a una quedada que se anticipa al Día Internacional contra la Homofobia, Bifobia y Transfobia desata la indignación y vuelve a revelar la actitud reaccionaria de las autoridades chinas. 

Adelantándose al Día Internacional contra la Homofobia, Bifobia y Transfobia, que se celebra este jueves, 17 de mayo, el pasado domingo, día 13, se celebra una quedada en el distrito 798 de Pekín, el barrio artístico por excelencia, donde un activista, conocido simplemente como Piaoquanjun, decide repartir chapas con el arco iris, hasta que los guardias de seguridad le llaman la atención indicándole que deje de repartirlas, procediendo a prohibir el paso a quienes lucen tan perversos símbolos en una zona visible. Entre esas personas una pareja de dos chicas, que son agredidas de manera violenta por los agentes, según se muestra en vídeos e imágenes publicadas en las redes sociales, que han desatado la controversia y la indignación en un país como China en el que es legal ser homosexual, pero sigue existiendo la discriminación, que en los últimos meses parece estar siendo fomentada desde el gobierno.

«En algunos países, las personas pueden casarse con quienes aman. Ni siquiera se nos permite ingresar al distrito de arte 798 con chapas del arco iris, y nos golpean», publica un usuario en Weibo con el hashtag «798beating» («798paliza», en español), que ha sido utilizado para propagar diferentes imágenes y vídeos del incidente en los que se muestran cómo los guardias de seguridad golpean y derriban a una de las jóvenes, tras lo que su acompañante intenta golpear a uno de los agentes antes de ser igualmente golpeada y derribada. Según Piaoquanjun ha declarado a medios de comunicación locales, ambas han sido hospitalizadas, mientras que el hashtag y los vídeo han sido bloqueados por las autoridades este mismo lunes.

«Ese evento y las chapas son un símbolo sensible de la lucha contra la represión (…). El espacio público para expresiones diversas se está colapsando. La gente se está dando cuenta de que debe defender sus derechos, pero la situación es muy difícil ahora», declara Lü Pin, activista y fundadora del blog Feminist Voices, advirtiendo que la comunidad LGBT china se encuentra en un entorno en el que es cada vez es más difícil hablar debido a que las autoridades están tomando medidas enérgicas contra la sociedad civil. «Esto no solo es una violación de la dignidad y los derechos de la comunidad LGBT, sino también un crudo pisoteo de los derechos básicos de los ciudadanos prescritos por la constitución», declara en una carta abierta on online el Centro de Educación de Género de Guangzhou.

Las actitudes reaccionarias persisten en el gigante asiático. En julio del año pasado, el organismo que regula la censura en internet en China aprueba nueva regulación que prohibe la publicación de vídeos en los que se muestre la homosexualidad. El mes pasado Sina Weibo, una red social de microblogging, decide acatar esta normativa al anunciar su intención de prohibir la publicación de cualquier imagen o vídeo relacionado con la homosexualidad, que rectifica ante la presión de sus propios usuarios. La censura también suprime el beso gay de Alien: Covenant, de la misma manera que finalmente los teleespectadores no han podido disfrutar de la última edición de Eurovisión, en este caso por decisión de la organización del festival, que decide no autorizar su emisión al canal chino Mango TV al tener la intención de censurar a los representantes de Irlanda y Albania, al primero por mostrar una pareja gay en la coreografía de su canción y el segundo por lucir un tatuaje con símbolos del orgullo, una contradicción si tenemos en cuenta que se prohibe finalmente el acceso al recinto con banderas arco iris.

Fuente Universogay

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