El obispo de Nottingham prohibe celebrar el Mes del Orgullo LGTBIQ+ a los colegios de su diócesis
La celebración del Mes del Orgullo LGTBIQ+ ha quedado prohibida en todas las escuelas católicas de la diócesis inglesa de Nottingham (Reino Unido) bajo nuevas directrices.
En mayo, la Diócesis de Nottingham publicó una guía sobre cuestiones de identidad de género en las escuelas católicas que, junto con declaraciones sobre una atención pastoral sensible, también prohíbe las celebraciones del Orgullo en las 84 escuelas católicas de la diócesis.
Titulado “Precious in My Sight: Accompanying Students Who Question Their Gender,”(“Precioso a mi vista: Acompañar a los estudiantes que cuestionan su género”), el documento afirma que ministrar con estudiantes con disforia de género es “un deber pastoral complejo pero esencial”, pero en el que los educadores católicos “se sienten sin apoyo y sin guía suficiente”, dijo el obispo. Patrick McKinney recomienda caminar con los estudiantes “con respeto, sensibilidad y compasión“, una frase que hace eco de la dirección del Catecismo Católico para ministrar con lesbianas y gays.
El texto está respaldado por asesoramiento legal y refleja con precisión la ley disponible y las directrices del gobierno nacional.
En su prólogo, el obispo Patrick McKinney de Nottingham dijo que las directrices se basan en gran medida en el documento titulado “Intricately woven by the Lord: A pastoral reflection on Gender by the bishops of England and Wales”, una reflexión pastoral sobre el género publicada por los obispos de Inglaterra y Gales el mes pasado.
Sin embargo, va mucho más allá que el documento de los obispos, porque “intenta ofrecer más apoyo pastoral y práctico y orientación para las escuelas”, un punto sobre el cual la declaración anterior estaba completamente en silencio. El obispo McKinney explica:
“Acompañar a los estudiantes que cuestionan su género es un deber pastoral complejo pero esencial al que las escuelas de nuestra diócesis prestan mucha atención. Sin embargo, soy consciente de que los directores y el personal involucrado en este importante cuidado pastoral, a veces se sienten desamparados y sin suficiente orientación sobre la enseñanza y la respuesta de la Iglesia Católica.
Espero que este documento apoye mejor a quienes participan en esta importante tarea pastoral y que los estudiantes aprendan que son profundamente amados por el Señor.
Agradezco a todos los involucrados en el acompañamiento pastoral de los jóvenes en nuestras escuelas por su cuidado, discernimiento y compasión”.
La guía se divide en cuatro partes: explica la antropología católica, describe los principios del acompañamiento pastoral, las aplicaciones prácticas y diez páginas de apéndices. La primera parte es estándar para las políticas de identidad de género publicadas principalmente por Estados Unidos. diócesis, que presenta enseñanzas negativas para LGBTQ y al mismo tiempo enfatiza el respeto por la dignidad humana.
La segunda parte, sobre la atención pastoral, califica la situación de cada persona como “compleja” y anima a que estos asuntos “nunca puedan reducirse a una única respuesta fija“, sino que “deben permanecer siempre fundamentados tanto en la caridad como en la verdad“. En este sentido, se mencionan las mejores prácticas generales para el cuidado pastoral, pero hay una prohibición explícita de fomentar un cuidado que afirme el género de los estudiantes y se advierte contra la transición social. El objetivo es ayudar a los estudiantes a aceptar el sexo asignado, en lugar de vivir su identidad de género. La guía es clara: se centra en los estudiantes, no en el empleo del personal LGBTQ+.
La tercera parte, sobre políticas y aplicaciones prácticas, es con diferencia la sección más larga. Se requiere que un nuevo trabajo pastoral con estudiantes con disforia de género sea realizado por personal que haya obtenido el “Certificado en Acompañamiento Pastoral (Escuelas)”, y generalmente no debe realizarse excepto de forma individual.
La guía continúa con la prohibición de celebrar el Orgullo en las escuelas:
La diócesis pide a los maestros que no celebren el Mes del Orgullo en junio, con la peregrina excusa de que es el mes en el que la Iglesia tradicionalmente honra al Sagrado Corazón de Jesús, porque “no podemos celebrar estilos de vida que son incompatibles con la enseñanza de la Iglesia. En resumen, no es apropiado que nuestras escuelas celebren el Orgullo porque no podemos respaldar toda la agenda”, dice un nuevo documento de 40 páginas titulado “Precioso para mi vista”.
“No es apropiado que nuestras escuelas católicas celebren el Orgullo, ya que no podemos respaldar toda su agenda. Si bien existe la obligación legal en el nivel secundario de que todas las escuelas incluyan un plan de estudios sobre LGBT, no existe ninguna obligación legal para que celebren el Orgullo…[E]n la Diócesis de Nottingham se debe utilizar el mes de la Historia LGBT+ (febrero) en lugar del mes del Orgullo (junio)… ¿Es correcto y veraz celebrar una agenda con la que no podemos estar del todo de acuerdo?… Aprobar sólo una parte del mismo podría considerarse deshonesto y podría generar confusión. Debemos, en cambio, buscar articular esos valores y principios con los que podemos estar de acuerdo, y afirmar la enseñanza católica de una manera diferente, distinta y pastoralmente positiva.”.
Del mismo modo, se desaconsejan los grupos de estudiantes LGBTQ+ y deben ser aprobados por la diócesis con las restricciones apropiadas, “incluso si se sugiriera que esto pondría en desventaja a los estudiantes atraídos por personas del mismo sexo o que cuestionan su género”. Se anima a las escuelas a cumplir con las leyes del Reino Unido sobre igualdad y derechos humanos, particularmente para garantizar que no haya discriminación contra los estudiantes. Sin embargo, el énfasis de esta sección está en explicar cómo las escuelas pueden optar por no participar o minimizar las políticas y prácticas inclusivas LGBTQ del gobierno. Por ejemplo, las escuelas “no deberían iniciar acciones proactivas para la transición social de un estudiante” a menos que “el estudiante lo solicite explícitamente“. Un ejemplo de preguntas que los educadores deberían hacer es “¿El estudiante ha sido influenciado por sus compañeros o las redes sociales?”
Las directrices también prohíben a los niños y niñas Trans el uso de sus pronombres preferidos. Se insiste en registrar los nombres y el sexo biológico asignado al nacer negándoles su identidad de género y el uso de uniforme, acceso a vestuarios, duchas y baños y, específicamente en competiciones deportivas para niñas. Si las circunstancias lo permiten, los educadores pueden utilizar el nombre o los pronombres elegidos por el estudiante, aunque para estos últimos “habrá muy pocas ocasiones” permitidas.
Los asuntos relacionados con baños, uniformes y espacios exclusivos para un solo género deben tratarse de acuerdo con el sexo asignado al estudiante al nacer, aunque se permiten opciones neutrales en cuanto al género o uniformes unisex. Finalmente, la educación sexual que incluya cuestiones LGBTQ+ es un mandato legal y debe brindarse a los estudiantes de secundaria, pero puede incluir perspectivas negativas LGBTQ de la enseñanza católica. La guía cierra con apéndices de recursos y un glosario.
Los defensores de LGBTQ+ en Inglaterra han criticado duramente la orientación de la Diócesis de Nottingham. Notts LGBT+ Network, un grupo local de igualdad, dijo que estaba “decepcionado” con el consejo “regresivo“. Martin Stone, líder de la red Notts LGBT+, le dijo a la BBC:
“El obispo de Nottingham ha sido explícitamente claro anteriormente acerca de la cálida bienvenida que los católicos LGBTQ+ deben recibir en la diócesis. Prohibir ahora las discusiones sobre posiblemente el mes más importante del calendario LGBTQ+ en las escuelas católicas podría verse como una decisión confusa y contradictoria.
“El Mes del Orgullo es, en última instancia, una celebración del amor, la igualdad y la diversidad. Tenemos voluntarios de múltiples religiones y muchos de ellos igualmente asocian esos atributos con sus creencias religiosas, por lo que ciertamente agradeceríamos una discusión con el obispo de Nottingham sobre esta decisión”.
Nottinghamshire Pride, que organiza eventos educativos y de celebración LGBTQ+ cada junio, calificó la guía de “decepcionante” y “regresiva”. La declaración del grupo continuó, según MSN:
“Teniendo en cuenta los recientes comentarios del Papa, hubiéramos esperado ver más acciones positivas por parte de la diócesis de nuestra zona. . .A todos los católicos LGBT+ que alguna vez se sientan excluidos de su iglesia, recuerden que siempre tendrán un hogar con Notts Pride”.
El Mes del Orgullo es una celebración común de las identidades LGBTQ+, pero se lleva a cabo de muchas maneras diferentes. Si hay aspectos del Orgullo con los que la Diócesis de Nottingham no está de acuerdo, todavía hay muchos aspectos (reconocer la dignidad de cada persona, aceptarse como amado por Dios, regocijarse en comunidad) muy alineados con el catolicismo. Generalizar y descartar el Orgullo al por mayor no es productivo ni sirve mejor a los estudiantes ni a sus familias. Como señala acertadamente Nottinghamshire Pride, el Papa Francisco ha demostrado que, incluso cuando hay diferencias, encontrar puntos en común y enfatizarlos es el mejor camino para la inclusión LGBTQ+.
La diócesis de Nottingham cubre casi todo Nottinghamshire y Derbyshire, así como Lincolnshire, Leicestershire y Rutland.
Hay 84 escuelas católicas en la diócesis, dos de las cuales son independientes, pero las otras están organizadas en tres fundación de academias múltiples.
Las de Nottingham y Lincolnshire pertenecen a la Fundación de Academias Multidisciplinares de Nuestra Señora de Lourdes, en Derbyshire están agrupadas en la Fundación de Academias Multidisciplinares de San Ralph Sherwin, mientras que las de Leicestershire y Rutland están en la Fundación de Academias Multidisciplinares de Santo Tomás de Aquino.
Fuente Agencias
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