Kate Brown aterrizó en la política a principios de los años noventa, cuando fue puesta al frente de la Casa Oregon tras la dimisión del republicano Judy Bauman. La dirigente se vio obligada a declararse bisexual después de un periódico de Oregon publicara su preferencia sexual cuando fue elegida para la Cámara de Representantes del Estado. En 1997, Brown obtuvo un escaño en el Senado de Oregon. En 2008, se convirtió en la primera líder mujer de la Cámara.

El nombramiento de Brown, quien se ha desempeñado como Secretaria del Estado desde 2009, es celebrado por las organizaciones que abogan por los derechos de las minorías sexuales. “Kate Brown hará historia al convertirse en la primera estadounidense abiertamente bisexual que se convierte en gobernador y eso hace que nosotros y toda la comunidad LGBT estén muy orgullosos”, indicaron desde la agrupación Victory Fund. En la organización recalcan que “lo más importante para los residentes de Oregon es que ella es una dedicada, apasionada e impresionante servidora público y está lista para este reto. Creemos en Kate Brown y su capacidad para dirigir a Oregon en este difícil momento”.

A lo largo de su carrera política, Brown ha contado con el apoyo de la comunidad LGBT, e incluso llegó a escribir un ensayo sobre los políticos homosexuales.Brown, que se casó en 2007 y tiene dos hijastros, escribió un ensayo sobre su bisexualidad para “Out and Elected in USA”, una colección que documenta a los políticos que decidieron “salir del armario” entre 1974 y 2004.

En su escrito, la flamante gobernadora  escribe sobre “su comentado reconocimiento como bisexual”,  después de que el periódico más importante del estado, The Oregonian, publicara una serie de notas sobre su sexualidad. “Cuando eso sucedió, tuve que enfrentar lo inevitable y dejar que los que me rodean supieran”. La reacción de su familia y amigos fue variada, ya que sus padres le señalaron que “sería mucho más fácil para nosotros si fueras lesbiana”. Sus cercanos gays la llamaban “medio rara” y sus amigos heterosexuales reconocieron que “nunca se me pasó por la mente la idea”. “Algunos días me siento como si tuviera un pie en ambos mundos, pero en realidad nunca pertenezco a ninguno de los dos”, escribió.

El nombramiento de Kate Brown marca la segunda victoria para los bisexuales que luchan por una mayor representación en la política estadounidense, después que el presidente Obama se convirtió en el primer presidente de Estados Unidos en utilizar las palabras “bisexual”, “lesbiana” y “transgénero” en un discurso del Estado de la Unión .

“Como mujer abiertamente bisexual y que aboga por la igualdad LGBT, Brown trae visibilidad a la comunidad bi como nunca antes”, declaró Alexandra Bolles de la organización GLAAD. “En las discusiones de los temas LGBT, el ‘B’ tiene una tendencia a ser pasado por alto. El nombramiento de Kate Brown representa para la comunidad bisexual un bache importante en la visibilidad”, consignan agrupaciones pro minorías sexuales. Y es que los bisexuales habitan un lugar único en el espectro de la sexualidad, a menudo luchando para convencer a amigos y familiares que aún existe la bisexualidad. Incluso tienen su propia forma de odio llamado bifobia, el cual es definido como “el miedo, el odio o la aversión de la bisexualidad o bisexuales que pueden ser albergado por lesbianas, gays y personas trans, además de los heterosexuales”. “En las discusiones de los temas LGBT, el ‘B’ tiene una tendencia a ser pasado por alto. El nombramiento de Kate Brown representa para la comunidad bisexual un bache importante en la visibilidad”,  afiman.