En una conferencia de prensa el pasado 27 de enero en la que se incluyó a tres miembros del Consejo de los Doce Apóstoles y una mujer líder de la Iglesia, el Movimiento de los Santos de los Últimos Días (Mormones) ha decidido posicionarse totalmente a favor del colectivo de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales. Los líderes pidieron una “justicia para todos” con un enfoque que equilibre la protección de la libertad religiosa con garantías razonables para las personas LGBT – específicamente en las áreas de la vivienda, el empleo y el transporte público, que no están disponibles en muchas partes del país.

“Hemos de aprender a vivir entre nosotros aunque no compartamos los mismos valores o creencias”… “Rechazamos la persecución y represalias de ningún tipo, incluida la persecución por motivos de raza, origen étnico, creencias religiosas, situación económica o las diferencias de género u orientación sexual “, es parte del discurso que dieron, dirigido a las autoridades norteamericanas. Porque la muestra de apoyo viene con petición: derechos iguales para todos, tanto gays como heteros, como personas de todas las creencias.

Los líderes de la iglesia dijeron que ambos lados del debate sobre la libertad religiosa y la no discriminación deben tratar a los demás con respeto.

Esta posición es coherente con el apoyo de la Iglesia en 2009 para las ordenanzas de Salt Lake City que protegían los derechos de vivienda y empleo para las personas LGBT y con las declaraciones que la Iglesia hizo contra el acoso y la intimidación de la juventud gay en 2010. En el momento de las ordenanzas de Salt Lake City, la Iglesia hizo hincapié en que su apoyo fue posible gracias a las disposiciones que también tuvieron en cuenta las libertades religiosas.

La Iglesia amplió esa posición el martes diciendo que apoyaría tales ordenanzas en  Utah y en toda la nación, siempre y cuando hubiera un enfoque equilibrado para proteger el ejercicio religioso constitucional y de conciencia.

Élder D. Todd Christofferson afirmó que este llamamiento a los líderes del gobierno de un enfoque equilibrado entre los derechos religiosos y homosexuales no representa un cambio o cambio en la doctrina de la Iglesia.

Hermana Marriott dijo durante la conferencia de prensa que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días cree que las relaciones sexuales que no sean entre un hombre y una mujer que están casados son contrarias a las leyes de Dios. “Este mandamiento y la doctrina provienen de la Sagrada Escritura y que no tienen la libertad de cambiarlo”, dijo. “Pero, Dios es amoroso y misericordioso. Su corazón se extiende a todos sus hijos por igual y Él espera que tratar a los demás con amor y justicia “.

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Fuente Mormon News Room,

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