Medio centenar de curas italianos ‘sale del armario’ para protestar contra la homofobia en la Iglesia
Medio centenar de curas italianos ‘sale del armario’ para protestar contra la homofobia en la Iglesia
“El silencio parece ser la mejor forma de sobrevivir”, denuncian
“No podemos hablar abiertamente de nuestra orientación homosexual con nuestros familiares o amigos, mucho menos con otros sacerdotes, o laicos comprometidos”, lamentan los ‘curas gays’ en el escrito, que ha convulsionado el mundo católico italiano y condiciona los trabajos del Sínodo
“No podemos hablar abiertamente de nuestra orientación homosexual con nuestros familiares o amigos, mucho menos con otros sacerdotes, o laicos comprometidos”
“Hay sacerdotes homófobos gay, que descargan fuera el conflicto que llevan dentro; no expresan la paz, sino que viven un ministerio distónico sofocando su propio ser con el clericalismo”
“El silencio parece ser la única forma de sobrevivir”. Este es el clamor de medio centenar de sacerdotes homosexuales italianos que, por primera vez, ‘salen del armario’ para denunciar el silencio y la ‘caza de brujas’ en una Iglesia que tiene la “homofobia interiorizada” en su seno, sus formas y sus actitudes. En un reportaje publicado en Domani, los clérigos hablan sin tapujos del odio al mundo gay que se inocula en los seminarios, y en los “prejuicios sociales” que, incluso, salpican los últimos documentos vaticanos, con una cuasi obsesiva referencia a la “ideología de género”.
El semanario ha tenido acceso a un documento que, bajo el título ‘Con tutto il cuore‘ (Con todo el corazón) fue presentado en septiembre durante un curso para agentes de pastoral y que ha circulado en los trabajos del Sínodo de la Iglesia italiana. Y se hace en un momento especialmente crítico en la Iglesia y la sociedad transalpinas, con la llegada al poder de los neofascistas de Melloni y donde, lamentan, “el silencio parece ser la única forma de sobrevivir”.
Homofobia interiorizada
“No podemos hablar abiertamente de nuestra orientación homosexual con nuestros familiares o amigos, mucho menos con otros sacerdotes, o laicos comprometidos“, lamentan los ‘curas gays’ en el escrito, que ha convulsionado el mundo católico italiano. “La Iglesia no es un contexto en el que podamos encontrar inmediatamente aceptación, especialmente para nosotros“, denuncian, señalando la “homofobia interiorizada” tanto en el seno de la jerarquía como en las estructuras diocesanas y en los centros de formación.
La realidad del clero italiano es similar a la que se vive en otros contextos, como el español, en el que distintos estudios (ninguno de ellos oficiales) apuntan a la posibilidad de que al menos uno de cada diez sacerdotes y religiosos tengan una orientación sexual diferente a la definida como “normal” por la institución, y son muchos los que se sienten solos y abandonados, y no únicamente por su condición sexual. No hablamos de estudios oficiales porque únicamente la Conferencia Episcopal francesa se ha preocupado por analizar esta realidad. El pasdo año, los obispos galos encargaron un informe sobre el ‘estado de salud‘ de su clero. Con datos preocupantes.
El síndrome del burn out
Así, el 9% del clero francés se confesaba deprimido, y hasta un 40% declaraba tener conlicto con la jeraquía o una importante carga de trabajo. Y es que el riesgo del ‘burn out’ es una realidad entre los sacerdotes y religiosos, especialmente europeos. El informe francés revelaba que dos de cada cinco sacerdotes abusan del alcohol, y que el 8% son adictos.
“A menudo se obliga a las personas a negarse a sí mismas en nombre de una espiritualidad hipócrita con efectos devastadores. Hemos escuchado historias de hombres consagrados desgarrados por la culpa hasta el punto de dejar la vida sacerdotal y, en algunos casos, quitarse la vida: una tentación terrible, incluso para algunos de nosotros’, sostienen los curas italianos en su escrito, en el que reclaman que el ‘camino sinodal’ en el que Francisco ha introducido a la Iglesia universal puede ser una “oportunidad de diálogo” frente a las “palabras duras” de la Iglesia oficial respecto al sexo y la homosexualidad.
No son los únicos que lo reclaman: en la mayor parte de las síntesis sinodales, en todo el mundo, el acercamiento al colectivo LGTBI son un clamor. Sin embargo, entre el clero, salvo contadas excepciones (como James Martin, trabajos como el elaborado por Jesús Donaire y la inestimable labor de colectivos como Crismhom) todavía queda mucho por hacer. “Hay sacerdotes homófobos gay, que descargan fuera el conflicto que llevan dentro; no expresan la paz, sino que viven un ministerio distónico sofocando su propio ser con el clericalismo”, concluyen.
Fuentes Religión Digital
General, Historia LGTBI, Homofobia/ Transfobia., Iglesia Católica
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