Tras cinco años de relación, Chema y Jonathan se han dado el sí quiero en Jerez, convirtiéndose así en los protagonistas de la primera boda que se celebra en España entre dos miembros del Cuerpo Nacional de Policía.

Chema, de Jerez, y Jonathan, de Algeciras, contraen matrimonio en la Real Escuela en una ceremonia que esperan que sirva para conseguir la “normalización” y para que los menores que sufren acoso por su condición sexual “vean que es algo normal”.

Una “cuestión de sentimientos” que Chema y Jonathan esperan que sirva para conseguir la “normalización”. Así definen los protagonistas la que ha sido la primera boda celebrada en España, concretamente en Jerez de la Frontera, Cádiz, entre dos hombres miembros de la Policía Nacional. La pareja, que ha afirmado tener muchos amigos gais dentro del Cuerpo, cuenta que se han casado por amor y “no por pertenecer a una institución u otra”. Ambos lucieron el uniforme de gala para la ceremonia y han contado que han permitido ser fotografiados así esperando que sirva “para que a los niños que les hacen bullying en el colegio por su condición sexual vean que es algo normal”. Algo normal y no un circo, es lo que Chema y Jonathan han querido para su boda.

El amor entre esos dos policías no fue un flechazo, sino “un disparo a primera vista”, dice Chema, haciendo un símil relacionado con su profesión. “Lo conocí cuando estaba pasando un mal periodo de mi vida, una ruptura, y él apareció de repente”. A partir de ahí iniciaron una relación que ya se ha formalizado en lo que esperan que sea “un matrimonio muy duradero”. “El sentimiento está ahí, que se haga visible depende de quien quiera darse cuenta del hecho. No es nada que tengamos que ocultar por pertenecer a un Cuerpo u otro”, explica Chema.

Chema es católico y Jonathan “el agnosticismo en persona”, por lo que, en caso de que la Iglesia lo llegase a permitir algún día, tendrían que debatir la posibilidad de casarse ante un altar. Sin embargo la adopción es algo en lo que sí están de acuerdo y una posibilidad que ya han pensado. “Se estigmatiza más a los padres gais que adoptan a hijos pero no se llega a pensar en el trasfondo de los padres que abandonaron a sus hijos; parece que los malos son los padres gais que han adoptado a una persona y no los padres que han abandonado a ese hijo”, lamentaba Chema.

La luna de miel será un coast to coast (costa a costa) por Estados Unidos, desde Seattle a San Diego.

Fuente La Voz del Sur

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