La nieta del “Duce” Benito Mussolini, fundador del Fascismo, defiende los derechos LGTB+
Alessandra Mussolini ha cambiado su opinión sobre los derechos LGBTQ+
La nieta del “Duce“, fundador del Fascismo y dictador de la Italia fascista Benito Mussolini ha hecho un “cambio de 180 grados” de fanática anti-LGBTQ+ a aliada.
La nieta del dictador italiano Benito Mussolini, Alessandra Mussolini, se vistió de los colores del arcoíris para apoyar al colectivo LGTBI, en pleno debate del proyecto de ley contra la homofobia y de cara al día del Orgullo Gay. La expolítica publicó un vídeo y varias fotos en su perfil de Instagram vestida con los colores de la bandera LGTBI en apoyo a este colectivo y bajo el título “cambiar significa ser libres”, en alusión a su cambio de opinión sobre el tema.
La nieta del fundador del Fascismo, enfundada en un vestido de retales de gasa y en otro de inspiración marina, ambos con los colores de la bandera LGTBI, compartió primero cinco fotos y luego un vídeo en su perfil en la red social, con 34.400 seguidores. En el vídeo suena la canción del verano “Mille”, de la veterana Orietta Berti y los cantantes Achille Lauro y Fedez, este último marido de Chiara Ferragni, y ambos paladines contra la homofobia.
Perteneció a partidos fascistas
Alessandra Mussolini, actualmente de 60 años, fue parlamentaria en Italia primero, en los Noventa, con partidos de inspiración fascista como el Movimiento Social Italiano y después con las formaciones de Silvio Berlusconi, Popolo della Liberta y Forza Italia.
Actriz y personaje público en su país, y sobrina de Sophia Loren por su madre, también fue europarlamentaria en el Partido Popular Europeo. El cambio de postura de Alessandra Mussolini ha suscitado debate en Italia. En 2006, en la televisión pública, mantuvo un duro debate con la activista transexual Vladimir Luxuria denunciando la adopción gay por la preocupación de que los niños vieran a los padres homosexuales “revolcándose en la cama“y le dijo que era “mejor ser fascista que maricón” (frocio, en italiano), pero ahora se ha convertido en una sorprendente defensora de los derechos de los homosexuales en Italia y toda Europa.
El abuelo de Mussolini, el dictador Benito Mussolini, envió a hombres homosexuales etiquetados como “degenerados” a una isla frente a la costa de Italia en un esfuerzo por librar al país de ellos y proteger la imagen del fascismo.
Su nieta, al parecer, está eligiendo un camino diferente al de su notable pariente.
La mujer de 60 años fue elegida eurodiputada en septiembre de 2014 y pronto comenzó una batalla de género con el parlamento de la UE por la casilla de verificación de género en sus formularios.
Cuando se le pidió marcar hombre o mujer en su cédula de eurodiputada, insistió en dejar el espacio en blanco.
Ella le dijo a The Times: “Me sorprendió. Es discriminatorio: tenían mi foto y mis huellas dactilares, ¿no es suficiente?”.
“¿Por qué es importante el género? ¿Y dónde está el ‘prefiero no mencionar’ que utilizan los jóvenes a la hora de firmar contratos? Les dije que están atrapados en la Edad Media”.
Según los informes, se negó a solicitar la tarjeta.
La nieta de Benito Mussolini, Alessandra Mussolini, vestida de arcoiris para apoyar al colectivo LGTBI. / Instagram
Lo más importante es el “amor”
Mussolini también respaldó un proyecto de ley para combatir la homofobia en el país. La ley, conocida como proyecto de ley Zan, buscaba castigar los actos de discriminación e incitación a la violencia contra personas gay, lesbianas, transgénero y discapacitadas, además de convertir la misoginia en un crimen de odio.
Alessandro Zan, quien redactó el proyecto de ley, dijo: “Estoy feliz cada vez que alguien como Mussolini cambia sus puntos de vista en función de su experiencia y reflexión personal”.
Sin embargo, la legislación fue rechazada posteriormente en el parlamento italiano.
En una entrevista con The Times, Mussolini notó su dramático cambio de perspectiva y dijo que “lo más importante es que puedes dar amor. La gente puede cambiar, puedes aprender de los jóvenes”, agregó.
Gabriele Piazzoni, presidente del grupo LGBT italiano Arcigay, dijo que Mussolini había hecho un “cambio de 180 grados de la política conservadora, heterosexual y católica con la que estaba asociada”.
“La gente suele cambiar de opinión gracias a un amigo o familiar LGBT. Eso vale cien de nuestras campañas”, agregó.
Fuente Pink News/Cadena SER
Comentarios recientes