Un individuo se confiesa autor del asesinato de un joven, que llevaba un mes desaparecido y con el que estaba manteniendo una relación sentimental. Estudian inscribir el crimen como parricidio.

Juan Luis Cartes Quezada, de 44 años de edad, se declara culpable del asesinato de Miguel Ángel Melgarejo Riquelme, de 20 años de edad, quien llevaba en paradero desconocido desde el mes de junio, y quien habría enterrado en una zona forestal, en el sector de Quilmo, al sur de Chillán, en la región de Biobío. Lo que algunos medios chilenos describen como un «crimen pasional», se trata en realidad de un crimen que se produce cuando el agresor descubre que su víctima le habría contagiado el VIH, además de que habría puesto en conocimiento de sus hijos de que estaba manteniendo una relación homosexual con él. Tras propinarle una puñalada en el cuello que le causa la muerte, lo entierra en una fosa.

El fiscal adjunto, Álex Montecinos, y la Brigada de Homicidios de la PDI estaban investigando la desaparición de Melgarejo Riquelme, cuando el homicida se ha presentado voluntariamente en el cuartel de la policía condesando ser el autor del crimen y proporcionando los detalles que han llevado a su localización este sábado, 06 de agosto. El ahora acusado ya tenía denuncias previas por violencia doméstica, estando el Ministerio Público estudiando si le imputa por delito de homicidio o de parricidio, en cuyo caso la pena sería de entre 15 años y un día hasta la cadena perpetua.

«El cadáver correspondería a Miguel Angel Melgarejo Riquelme de 20 años, el que presentaba signos de descomposición, estimándose que la data de muerte sería de al menos un mes, lo que resulta coincidente con el relato y la denuncia que tenía la PDI respecto de un joven desaparecido en extrañas circunstancias en Chillán, aunque producto de lo mismo no se pudo comprobar la identidad de la víctima, por lo que serán peritos del Servicio Médico Legal los que deberán realizar el peritaje para establecer identidad, data y causa de muerte, ya que el cuerpo sin vida fue derivado a ese recinto», declara el fiscal a cargo de la investigación.

«Expresamos públicamente nuestra solidaridad a la familia de Miguel Ángel y hacemos un llamado para que el Estado implemente en breve políticas públicas contra la violencia en parejas del mismo sexo. Si hoy un hombre está pasando por un difícil momento porque es agredido por su pareja del mismo, no sabe dónde acudir para buscar ayudar, pues este tema no se ha sincerado», asegura el MOVILH, desde donde instan a considerar este asesinato como parricidio.

El MOVILH se ha prestado a proporcionar asesoría psicológica y legal gratuita a la familia de la víctima y ha recordado que «el Estado se comprometió en el Acuerdo por la Igualdad, firmado el mes pasado con nuestra organización, con la mediación de la comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a enfrentar este problema con políticas públicas, por lo que esperamos la implementación de medidas en breve».

Fuente Universogay

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