A los mártires del judaísmo siguieron los mártires cristianos, que fueron y son ejecutados por fidelidad al Evangelio.
Cada vez que un gobierno absolutista, del signo y color que sea, ha querido suplantar la conciencia personal y soberana a los fieles al Dios único, el derramamiento de la propia sangre, como la de Cristo en la cruz, se ha convertido en testimonio elocuente de la inviolabilidad de la propia conciencia.
Nada ni nadie puede sujetarla sino el propio Dios. Así una de las tareas más urgentes de los creyentes y gays es la formación de la propia conciencia.
Bernardo Yoel.
-----------------------------Ante las embestidas de los cristianos homófobos, no te acobardes.-
. Llevamos XX siglos hablando de amor y no nos amamos.
. El Reino es y será para los que aman y se aman.
. En las seminarios se profundiza en los dogmas y se tiene miedo hablar del amor.
josepmaría