Era un hombre muy activo, apostólico...nunca paraba. Por eso le echó en cara al Abad Ferran, de que servía perder el tiempo en la Contemplación, cuando había tanto que hacer en la Viña.
No respondió inmediatamente el Rvd. Al cabo de un rato dijo:
- No creas que la verdadera meditación sea pasiva. En realidad nos da lucidez y nos hacer salir hacia el otro.
Hizo una pausa y añadió:
- ¿Cuantas veces en tus acciones te has dado cuenta en medio del camino de que ibas en dirección equivocada? Mira, la Contemplación verdadera te permite ocho cosas:
- Ver adecuadamente. Mirar al mundo y a las cosas sin prejuicios.
- Hablar adecuadamente. Sin mentir,ni insultar, ni exagerar.
- Pensar adecuadamente. Nos libra de nuestro pensar denominador.
- Actuar adecuadamente.Sin oprimir ni ofender.
- Vivir adecuadamente. Dando a las cosas el valor real que tienen.
- Esfuerzo adecuado. En aquello que vale realmente la pena.
- Atención adecuada. En vez de dispersarnos.
- Concentración adecuada. Dejarse penetrar por lo importante.
El hombre, pensativo pregunto al Abad. ¿De donde has sacado esos ocho puntos?
Rió el Abad y respondió:
- Hijo mío. Es el OCTUPLE CAMINO DEL BUDISMO. Y se fue a la fuente a llenar el cántario de agua fresca.
yoel.
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Si nos alimentáramos de la Palabra del Profeta de Nazaret, el Espíritu de nuestro Padre Dios hablaría por nosotros.
Un profesor de una universidad me decía. "No se si existe Dios o no. Lo cierto es que yo cuando leo el Evangelio, me da paz y me llena.
La soledad No hiera. Estar solo SI.
El mismo sentimiento la misma magia tiene, enamorarse de una mujer que de un hombre.
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