La valoración de las personas no debe ser por meros criterios humano, sino por aquellos que conducen a una vida nueva a partir de la resurrección de Cristo Jesús.
Cristo nos hace criaturas nuevas que aspiran a la novedad cristiana, la del amor y la misericordia, la de la reconciliación y el perdón.
Para ello tenemos un modelo, Cristo, que se hizo pecado con tal de que venciera la verdad,y de esta manera recibimos la salvación de Dios (2 Cor 5, 14 -21).
La SOBERBIA también está entre los buenos
El hombre, el cura, la mujer eran una celebridad. Todo el mundo hablaba bien. Los menciona la prensa, la radio...Estaban presentes en todos los eventos de la ciudad. Personas muy apreciadas y en el fondo están solas, su vida apenas tiene sentido.
Nos aferramos a la gente. Esperamos que nos amen, no en el exterior sino con un amor total...Pero los seres humanos somos limitados. Nunca conseguimos de los demás la plenitud...
Si actuamos para que los demás nos quieran, estamos perdidos.
Lo que hemos de buscar es ser nosotros mismos y amar nosotros a los demás, aunque nuestro amor sea limitado.
yoel.