Toma al niño y a su madre y huye a Egipto
Mt 2, 13-23
El objetivo no es vivir como vivieron Jesús, José y María. La vida ha cambiado mucho desde entonces. Los problemas que tenemos que enfrentar nosotros no son los mismos que los que tuvo que enfrentar aquella familia. Sin duda que la relación entre los esposos ha cambiado, también la relación de los hijos con los padres y de estos con los hijos. Pero hay algo que no puede cambiar: la vida de una familia se construye sobre la base del amor y el respeto mutuo con grandes dosis de paciencia y diálogo. La violencia, la rigidez, la incomunicación llevan con seguridad a la destrucción del hogar y a la larga a la destrucción de las personas que lo forman. Amor, respeto, paciencia y diálogo son la base segura sobre la que podemos afianzar la vida de nuestras familias. De ese modo, como la familia que fueron Jesús, María y José, nuestras familias serán también un signo de la presencia amorosa de Dios en medio de nuestro mundo.
https://comunidadfronterasabiertaszaragoza.wordpress.com/2019/12/29/jesus-maria-y-jose/
Feliz Navidad