El Dalai Lama que ha sufrido en propia carne la violencia de los chinos del Tibet y conoce las espantosas experiencias, las torturas y atrocidades múltiples con los suyos, nunca deja de rezar por los opresores de su país y sus hermanos.
¿Por qué preocuparnos por los que han destrozado nuestra vida? , los que nos han insultado,despreciado , se han reído de nosotros en nuestra casa, de nuestra familia...
Has pensado alguna vez en rezar por esa persona, por ese familiar? De quien se ha puesto en contra tuya manifestando su rencor, ha manifestado tus acciones y motivos dañando tu reputación. La actitud beligerante de esa persona te duele hasta robarte la paz.
Prueba a rezar por esa persona. El Señor te dará SU PAZ.
YOEL