Mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida
Jn 6, 51-58
Participar en la Celebración es un modo de comprometernos públicamente a vivir al estilo de Jesús. En cada Eucaristía, Jesús nos repite la misma pregunta que les hizo a los Zebedeos: “¿Sois capaces de tomar la copa que yo he de beber?” (Mt 20,22). Recibir la vida en la comunión de la carne y de la sangre, del pan y del vino, en la Eucaristía significa vivir de una forma diferente, de acuerdo con el Evangelio, nuestra vida de familia, nuestra relación con los amigos, en nuestro trabajo, como ciudadanos. La Eucaristía se convierte en lugar de vida y la vida, nuestra vida, se convierte en lugar donde vivir lo que hemos recibido en la Eucaristía. Nuestro estilo de vida certifica si realmente hemos participado en la Celebración común de los cristianos, si nos hemos hecho “sangre de su sangre”.
https://comunidadanawinzaragoza.wordpress.com/2018/08/19/xx-domingo-del-tiempo-ordinario/
Feliz domingo