Todos hemos visto alguna mariposa revoloteando alrededor de la llama de una vela. Se acercó tanto que acabo presa del fuego consumida por la llama.
En la vida espiritual es más importante la humildad que la perfección. Muchas personas, obsesionadas por la perfección, han acabado presas del orgullo y la autocomplacencia. En la vida espiritual hay que aceptarse, ser sencillez y confiar en el Amor de Dios.
YOEL. Valenica