A veces nos cansamos del exceso de trabajo. Incluso solemos decir que " estamos quemados".
La forma de que esto no nos ocurra es buscar momentos aunque sean cortos de descansar " con El".
Debemos saber encontrar momentos de soledad con Jesús para reponer nuestras fuerzas.
En el N.T. vemos a Jesús que se conmueve ante la gente que lo sigue que parecían "ovejas sin pastor". ¿Que diría hoy al observar nuestra sociedad?.
YOEL