¿El cristiano es parte de este sistema de cosas? ¿Podemos creernos distintos de los demás, por vivir en otra provincia, en otra ciudad o en otro país? ¿Puede el cristiano ser nacionalista?
https://comunidadanawinzaragoza.wordpress.com/
Abdías.
¿El cristiano es parte de este sistema de cosas? ¿Podemos creernos distintos de los demás, por vivir en otra provincia, en otra ciudad o en otro país? ¿Puede el cristiano ser nacionalista?
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Abdías.
Hola Abdías:
No, el cristiano no puede ser nacionalista. Puede ser patriota, amar a su tierra, y considerar patria aquello que le venga en gana: un Estado soberano, una comunidad idiomática, un territorio geográfico o histórico, etc... Pero nacionalista y cristiano es incompatibe. ¿Y por qué? el nacionalismo, sea el que sea, estatalista, separatista, identitario, supremacista, etc... siempre ha de tener un enemigo, interno y externo, casi siempre considerando enemigo al diferente o al que no piensa igual. Y allí ya desaparece el Evangelio y el cristiano deja de serlo. El nacionalismo es una exaltación de la nación. Patriotismo es amor a la patria, real o inventada, que no lleva más allá del sentimiento.
El patriotismo no hace ruido, mientras el nacionalismo siempre lleva a la misma escena: una muchedumbre llena de banderas, gritando, sintiéndose superiores a otros pueblos, dejando de lado al que dentro de la "nación" no comulga con ellos,y por mucho que sonrían , imponen y es lo que buscan, imponer. Alabando a sus caudillos, haciendo promesas de ser el pueblo feliz por autonomasia, rompiendo la conciencia pacífica y tirando al cubo de la basura las reglas del juego del Estado de Derecho.
El nacionalista, tenga la bandera que tenga, siempre se sentirá superior a los demás pueblos, siempre tendrá otro pueblo o una colectividad "enemiga" a la que hay que neutralizar... Y el que apoya esto, no es cristiano, diga lo que diga.
Si nacionalismo es querer ser más que los otros pueblos e imponerles su cultura, sus leyes, por la fuerza, naturalmente esto no es cristiano. Otra cosa es el derecho a la autodeterminación, que es un derecho fundamental de las naciones. Como el derecho a defender la propia cultura y la propia soberanía.
El papa Juan Pablo II afirmó por ejemplo en una ocasión que «la autodeterminación soberana de los pueblos y naciones» es un derecho del orden social y relacionó al mismo con Polonia.
Wojtyla añadió sobre este tema: «Hijo de un pueblo con cultura milenaria, que ha sido privado durante mucho tiempo de su independencia como Estado, conozco por propia experiencia el alto significado del principio.»
https://elpais.com/diario/1979/01/13/internacional/285030004_850215.html
Miquel
Tienes toda la razón Miquel. Polonia puso casi seis millones de muertos sobre la mesa, la destrucción del país y la aniquilación de sus elites culturales en campos de concentración. Antes fue devorada por los Zares y los prusianos, los cuales se dedicaban a hacer campañas de aniquilación.
Polonia tenía el derecho a ser una nación porque sus propias vidas dependían de ello. Comparado con Polonia otras reindivicaciones son de juntas de vecinos del quítate tu que me pongo yo para seguir robando, tanto los del centro como los circulares.
En España, desgraciadamente sufrimos el nacionalismo centralista y el centrífugo, a mi entender destructores todos, que en vez de construir una sociedad más justa, intercultural y de respeto a las diferencias, hacen que implosionen todas las cosas buenas que nos podrían unir.
El amor a la verdad, la justicia y el respeto a nuestro prójimo... eso ya para mañana que hoy tengo prisa. Recordemos el mandamiento que Jesús nos dejó:
Amarás a el Señor tu Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a tí mismo.
Siendo claros, la Iglesia y el consenso internacional manifestado en Naciones Unidas ha defendido el derecho a la autodeterminación de los pueblos en el contexto del proceso de descolonización que se vivió a partir de los años 50 del pasado siglo.
En estos momentos, Naciones Unidas reconoce sólo a dos naciones sin Estado a las que reconoce su derecho a la autodeterminación: Palestina y la República Árabe Saharahui Democrática.
Todo lo demás pueden ser legítimos deseos, pero no basados en el orden internacional.
El caso de Polonia no es extrapolable pues era una nación soberana que fue desmembrada por el pacto Stalin-Hitler que se repatieron su territorio masacrando a su población, entre ellos a 4 millones de judíos...
Eso sí, lo que no es cristiano es ver a determinados "cristianos" defender unos "derechos" insultando y escarneciendo a otros hermanos...
Un saludo
Mudejarillo
País Vasco
Lo que pasa es que el derecho a la autodeterminación normalmente se ha reconocido internacionalmente a posteriori, no antes de que sucedieran; y no sólo en procesos de descolonización, por ejemplo entre Noruega y Suecia.
Pero este mensaje no es tanto para hacer un debate político sino para alertar ante el peligro de catalogar como "no cristianas" posturas políticas que a uno no le gustan. Así por ejemplo catalogar como "bien moral" la unidad de España como hizo la Conferencia Episcopal Española. En este sentido, tan cristiano es querer la independencia de Cataluña como querer la unidad de España. La unidad de España es una cuestión política, no divina.
Y estoy plenamente de acuerdo en que el insulto, el menosprecio del otro, no son cristianos.
Miquel
La Iglesia no puede ni debe meterse en cuestiones que tengan que ver con banderas, ya sea la Conferencia Episcopal Española, ya sea desde lugares en Cataluña que son claros símbolos políticos y desde donde lo que se diga no es inocente. Los Estados son creaciones humanas y no obras divinas. Y eso supone que sea muy discutible que territorios merecen ser Estado y convertir eso en una lucha comparable a la de la abolición de la esclavitud o meter a ejemplos sangrantes como el polaco, donde el 20% de su población murió en la ocupación nazi. Y por supuesto, meter a Dios para defender la integridad de cualquier Estado está de más.
Yo como cristiano nacido en Cataluña, quiero que todo el mundo sienta la bandera y la patria que desee. Yo tengo en mi entorno a gente independentista y a gente totalmente contraria. Y ambos tienen (tenemos) derecho a sentir cual es nuestra nación. El límite es el insulto, el desprecio o peor aún, el querer negar el derecho del otro (el derecho real, el existente en todas las Democracias, no el derecho falso ni el inventado). La Iglesia debe atender y amparar a todos, desde el independentista más antiespañol, hasta el que vive en Cataluña y desprecia totalmente la lengua o la identidad catalana. En eso creo que la Iglesia en Cataluña no lo ha hecho del todo mal, para ser que los que vivimos aquí sabemos que está más cerca de unos que de otros.
En el tema de la autodeterminación, obviamente, se dicen muchas cosas que no son verdad. Hay una guerra de propaganda y contrapropaganda en Cataluña y la calle la han ganado aquellos que han hecho mejor ese trabajo, sobretodo porque la otra parte ha estado ausente. La ONU solo reconoce ese derecho a los pueblos colonizados, o en situación de opresión y represión total. En estos momentos no hay en Europa Occidental pueblo alguno que esté en esta situación, afortunadamente.
Y no olvidemos la figura del DIT (Derecho a la Integridad Territorial) que los Estados soberanos tienen y que los organismos internacionales no han negado jamás, siempre que no se use la opresión ni la represión excesiva. Tampoco eso tiene que ver con el cristianismo, sino con el juego político.
Sobre la autodeterminación y el cristianismo, esta es ante todo una fe que busca la liberación del ser humano de todo mal y que esta se convierta en una liberación colectiva. No habla en ningún momento de liberación de colectividades, sino de una liberación que abarque a todo ser humano, de ser libre del mal propio y del mal ajeno.
Ya lo dijo el Maestro: "Dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios". Es decir, autodeterminación y nacionalismo para la política, y liberación del mal y a través de la verdad a todo ser humano para el cristianismo.
Sería interesante recuperar el concepto de "Piedad". También en el ámbito de lo religioso...
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