El Profeta de Nazaret nos pide a los que intentamos seguir sus pasos, que no seamos rápidos en juzgar.
No se trata de que lo aceptemos todos y lo excusemos todo. Pero una cosa son los hechos, que objetivamente son buenos o malos, y otra las personas que los hacen.
Somos benévolos con nosotros. Enseguida encontramos excusas para nuestros hechos. ¿Conocemos suficiente al otro para juzgar su grado de maldad?
No olvidemos que con la misma medida que midamos se nos medirá.
Quisiera pediros un favor: una oración y un recuerdo por los NADIES. Sí, LOS NADIES los gays de pequeños pueblos que no son nadie, que son ignorados por todos los vecinos, que ignoran que nay muchos nadies en muchas partes. Puede que conozcas personas gays y lesbianas que no son nadies porque nunca han sido como quieren ser. Tengamos un recuerdo ante el Señor por los Nadies, que no pueden dejar de ser Nadies.
YOEL.