En nuestros días entendemos claramente lo que es una prostituta, pero nos queda algo lejano el concepto de publicano. Pues el sinónimo actual es muy claro. Un publicano es un CORRUPTO. El publicano se aprovecha de su cargo de recaudador de impuestos, para extorsionar a los demás y enriquecerse. Y tal como está el panorama en nuestra sociedad, hoy nos dolería mucho que Jesús nos dijese que los corruptos son mejores que nosotros. ¿Quiere decir Jesús que, para entrar en el Reino, hemos de ser corruptos y prostituirnos? ¿Hemos de ser inmorales?
Curiosamente personas a las que hemos despreciado por su falta de moral, quizá comprendan mejor que nosotros el camino del Reino. Carlos, que siempre andó entre ladrones,drogadictos y prostitutas, me comentaba muchas veces este Evangelio. Y me decía:
-Tengo verdaderos problemas para encontrar a alguien que acoja, no siquiera pagando, a los enfermos de sida en fase terminal. Hay una antigua prostituta, que tiene la casa llena y nunca me dice que no. Nosotros tan cristianos, religiosos, los admitimos en nuestra comunidad? NO.
Él estaba seguro que esa prostituta era una de las que nos precedería en el Reino a todos.
Porque lo que viene a decirnos el Profeta de Nazaret hoy, es, que lo que quiere de nosotros es nuestro corazón, no nuestra palabrería.
S.J. de la Cruz escribió: "Al final de los tiempos seremos juzgados del Amor.
YOEL.