( Mateo 28, 8-15 )
Sabemos muy bien donde está Galilea y que allí se desarrollo parte de la proclamación del mensaje de salvación. Pero, ¿donde está Galilea en nuestra vida? ¿A donde acudir? ¿Dónde nos convoca y nos llama Jesús para que le veamos? ¿Acaso tendremos que ir a Galilea también nosotros?.
Galilea, es el lugar de la proclamación. Es el mensaje con mayúscula y el origen de la verdad. Es allí, en los Evangelios proclamados por Jesús, donde encontramos el camino, la Verdad y la Vida. Es decir, donde nos encontramos con Él. Reflexionar, leer y escuchar la Palabra y tratar de vivirla es encontrarnos con el Jesús Resucitado.
¿Y cómo actuar? Qué hizo Jesús además de proclamar su Palabra? Dice el evangelio que paso por este mundo haciendo el bien y curando toda clase de dolencias y enfermedades (soberbia, lujuria, rencores, desprecios, mal genio....) Se trata de vivir las obras de misericordia. Si no creéis en Mí, cree al menos en mis Obras (Jn 10,38). Es ahí en esa forma de vivir donde le encontramos.
También lo encontramos en el grupo con el que compartimos la Fe. Cuando te entregas, te partes y repartes entre los hermanos cristianos o indiferentes, soportándolos, aceptándolos, sirviéndolos y haciendo posible que tu amor sea compartido, repartido y entregado.
Vayamos, pues a nuestra Galilea en busca del Señor, porque allí nos encontraremos cada día con Él, Vivo y Resucitado en todos aquellos pobres, necesitados, marginados...
YOEL. C. Valencia