Ya he leído 263 páginas de este pedregal del libro de Charanse. Me resulta cansino, puede por que lo llamativo de la vida interior eclesial la conozco. Los comentario que de la aldea Vaticana y sus cloacas van saliendo por distintos conductos a la luz y la pestilencia que desprenden, años ha, que han llegado a las narices incluso de los menos sensible.
Los que sientan curiosidad por ese mundillo, descubrían lo feo y negro que es. Los que busquen luz y paz que vayan directamente al Nuevo Testamento.
Resulta un tanto interesante la trayectoria personal de Krzystof Charamsa que tiene todo mi respeto. Cada cual hace lo que puede para no ahogarse rodeado de tanta caca.
YOEL