Lo eterno no es el cielo
de instantes destruidos
ni frases de poetas
ni letras en los nichos.
Son risas que aparecen
abrazos, bosques, niños
mil gestos que ennoblecen
a un hombre sin destino.
Lo eterno no son las grietas
que se abre en el abismo
luciendo vanos trajes
de miedos y de ruidos.
Son risas no calladas
abrazos compartidos
y el sueño de tus ojos
amando mis caminos.
Lo eterno es un momento
que viste de ternura
lo eterno va y te encuentra
lo eterno no se busca.
(Manuel)