A Jesús le recriminan que no cumpla algunos ritos. Los judíos daban mucha importancia a los ritos. El Profeta de Nazaret da importancia a lo interior, lo que anidamos en el corazón. No al exterior, no lo que decimos, si por "muchos" o por "todos".
Vivimos en una sociedad en la que predomina la apariencia. Buscamos una buena imagen. En lo religioso damos importancia a las ceremonias, a las grandes asambleas. Jesús nos dice que lo importante está en el interior. Nuestra verdad es lo que somos, no lo que aparentamos.
YOEL. Valencia.España