¡Ay de aquellos que solo ven en el pobre una mano que mendiga y no una dignidad indestructible que busca justicia.
Que solo ven en los numerosos niños marginados una plaga y no una esperanza para todos que hay que cultivar.
Que solo contemplan lo sano, bello y poderoso y no esperan salvación de lo mas bajo y humillado.
Porque no podrán contemplar la salvación que brota en el Jesús marginado desde abajo!
Un abrazo
D.G.;Zaragoza