Foro Cristianos Gays » Cristianos Gays - Foro de debate

Fe

(3 mensajes)
  1. Visibles
    Miembro

    Corro. Vuelo. Existo.
    Mis zapatillas blancas golpean el suelo de tierra. A mis espaldas, la efímera nube de polvo que levantan mis pies. Delante de mí, el horizonte solitario. Corro, contra la inercia de mi miedo a estar solo, a soportar mi silencio, en el persistente recuerdo de una persona ausente. El viento me roba unas pocas lágrimas, pero yo le robo su velocidad. En mi carrera hacia ninguna parte, cada pisada alimenta la distancia, y aunque no sé dónde llegaré, tan sólo sigo corriendo. Quizá porque no sé qué otra cosa puedo hacer, o quizá porque es lo único que quiero hacer. Correr, para olvidar a un ser amado. Correr, para anestesiar mis sentimientos, y esparcirlos al margen del camino. Correr, para volver a sentir mi sangre en cada fracción de mi cuerpo, y fundir mi piel con el sudor. Tan sólo deseo correr, en mi afán por liberarme del pensamiento y la razón. Que mi alma pueda volar, libre e independiente, más allá del camino. Corro, vuelo, existo, en una soledad que no sé asimilar. Corro. Vuelo. Existo. Urgido por la añoranza de la persona a quien amé. Asediado por el ejército de nuestros recuerdos compartidos. Sintiendo la inevitable soledad, como el sudor en cada poro de mi piel. Corro, vuelo, existo.
    Y tan sólo en mi Fe hallo mi fuerza.
    Para seguir corriendo.
    Volando.
    Existiendo.

    "La escritura es la voz del alma"

    Valencia, 5 de julio de 2016.

    Publicado hace 8 años #
  2. Alamo
    Miembro

    Igual no viene muy a cuento, ni creo que lo que te diga te vaya a ayudar pero yo creo en la espiritualidad del ejercicio físico.
    Correr me ayuda a centrar mi mente que, en muchas ocasiones está dispersa. He tenido ocasiones en que, mientras hacía ejercicio físico, he logrado alcanzar soluciones a situaciones de mi vida.
    También al poner el cuerpo al límite y al creer que no se puede más, solo de mi mente, de mi conciencia, de mi alma he conseguido arrancar fuerzas de flaqueza para dar una zancada más.
    Me gusta descubrir la fuerza del espíritu en mi piel, en el esfuerzo de mi músculo, en la gota de sudor porque sé que, en esos momentos, Dios también se hace presente en mi vida para recordarme que mi cuerpo y mi salud es un regalo maravilloso que Él me ha dado.

    Un abrazo.

    Álamo. Zaragoza.

    Publicado hace 8 años #
  3. Visibles
    Miembro

    Me siento agradecido por tus preciosas palabras, Álamo. ¡Wow, gracias!
    Y ante todo me siento muy identificado. Las personas que amamos el deporte, aprendemos a través del entrenamiento, que los límites del cuerpo son más psicológicos que físicos en realidad. Cuando uno cuida su cuerpo, ¿acaso no se esforzará mucho más por cuidar su alma?

    La satisfacción de terminar una carrera o de correr un kilómetro más que el día anterior, es bellísima, pero tan sólo es la antesala de una satisfacción mayor, que es la que le regalamos a nuestra alma cuando encaminamos nuestro esfuerzo en hacer el bien a los demás.
    Por eso me identifico con tu punto de vista, porque creo que alma y cuerpo son una unidad, y uno no puede estar al 100% si el otro no lo está. "Mens sana in corpore sano"...

    A mi por ejemplo, la natación me ayuda a desconectar la mente. Esta mañana, en la piscina, me venía a la mente la sensación de pena que a veces experimento cuando pienso en el pasado. Y entonces una fuerza latente pero más intensa, me hizo ver con claridad. No era el momento de la tristeza, sino la ocasión del esfuerzo, la lucha contra el abatimiento físico y mental. Y bueno, en mi humana ignorancia, pienso que esa fuerza es parte de mi Fe, de esa fortaleza que Dios nos da a todos.

    Esta noche, mientras corría en la pista de atletismo, vi un espectáculo precioso. Era el sol en su último momento de la tarde. El cielo, durante unos pocos minutos, adquirió el color indefinido de los sueños, de los sentimientos a los que uno no sabe poner nombre. En ese silencioso atardecer, una paz hermosa me fortalecía, y correr era para mí lo único que tenía importancia en mis pensamientos.

    Muchas gracias por haber compartido tu valioso mensaje. Que el Señor te haga fuerte.

    Un abrazo enorme para todos.

    Valencia, 6 de julio de 2016.

    Publicado hace 8 años #

RSS feed for this topic

Responder

Debes conectarte para enviar un mensaje.