Solo, en silencio, en la noche.
Atento. Consciente. Observador.
Cierro los ojos. No hay sonido a mi alrededor, ni anhelos, ni imágenes.
Tan sólo la paz que calma mi espíritu.
Paz que sólo Dios, en su Amor por cada uno de nosotros, puede ofrecerme en esta noche.
Valencia, 29 de junio de 2016.