Vivimos en la sociedad de la perfección...No admitimos errores. Todo ha de ser bello, perfecto...Colocamos en los lugares públicos asientos de diseño. No importa que nadie resista allí más de un minuto sentado. Los edificios han de ser originales, aunque luego no sean prácticos. Al que sabe robar con perfección se le considera grande mientras no se le descubra. En ese caso todos le giran la espalda (los que son como el me refiero), por que se ha dejado descubrir...La gente ha de ser perfecta y para eso están los gimnasios el pilates y la cirugía estética.
Y es que, buscando la perfección, perdemos de vista la realidad.Olvidamos que las fotos de las revistas están retocadas con fotoshop. Que las grandes y perfectas empresas,se derrumban de la noche a la mañana. Señal que no eran perfectas. Que la ciencia avanza y las cosas que parecían perfectas, resulta no serlo tanto...
Los imperfectos, tenemos el aliciente de poder mejorar día a día. Podemos mirar lo que hacemos y pensar: "Pues no soy tan malo como creía..."
bernardo YOEL Valencia