Cuando el viento sopla a favor de mi barca todo se hace más sencillo, nos sentimos en la verdad y puede que surja la tentación de medrar; pero cuando el viento sopla en contra surge inmediatamente la tentación de buscar culpables. Si el tiempo pasa y no vuelve el protagonismo de antaño, entremezclamos sentimientos y realidades muy diversas.
¿Será que el barco se hunde y hay que prepararse a bien morir? ¿Será que este mundo está tan errado que no es capaz de entender lo que se piensa de ciegos y sordos que estamos? ¿Será que falta el ardor suficiente para hacer prender el fuego del Pofeta de Nazaret?. La reacción más común es buscar culpables donde descargar culpas, miedos y decepciones.
En tiempo de "crisis" necesitamos ser críticos, saber elegir, saber dejar lo que ya no vale, saber escoger lo nuevo que nos ayude. ¿Qué hacer en nuestra vida cristiana hoy? Dos cosas no han caducado;vivir en unión con Dios y amar al hombre: oración y caridad, nos recuerda Jesús cuando sintetiza los mandamientos en dos.
fr. Bernardo YOEL cg. Valencia.España