Salían del oficio de Laudes, sonriendo,le dijo a su Prior:
-¿Has oído el Evangelio? Todos somos Nicodemo. No entendemos eso de volver a nacer.
El Prior respondió:
-Claro. Es que eso de volver a nacer, si se toma literalmente, es imposible.
Volvió a sonreír El Abad y repuso:
-Pero en sentido metafórico, si lo entendemos, no lo creemos. "¿Cambiar a mi edad?" ."Yo siempre he sido así". " A mi edad dejadme tranquilo". Eso es lo que decimos. Y es posible que sea cierto si pretendemos hacerlo solos.
Miró profundamente a su Prior y concluyó:
- Pero no estamos solos. Él está junto a nosotros. Nuestros hermanos están junto a nosotros. Si no encontramos cerca hermanos como nosotros, hay que buscarlos. Siempre es tiempo de volver a nacer, siempre podemos cambiar, siempre podemos crecer...pero hemos de desearlo de verdad.
fr. Bernardo YOEL.cg. Valencia.España