Quedóme una verdad de esta divina Verdad
que se me representó,
sin saber cómo ni qué, esculpida,
que me hace tener
un nuevo acatamiento a Dios.
No vi nada,
mas entendí el gran bien que hay
en no hacer caso de cosa que
no sea para llegarnos más a Dios,
y así entendí
qué cosa es andar un alma en verdad
delante de la misma Verdad.
Esto que entendí es darme el Señor
a entender que es la misma Verdad. (santa Teresa de Jesús; V40,3)
Un abrazo
D.G.;Zaragoza