Solo digo que
para estas mercedes tan grandes
que me ha hecho a mí el Señor
es la puerta la oración.
Cerrada ésta, no sé cómo las hará
porque, aunque quiera entrar
a regalarse con un alma
y regalarla, no hay por dónde,
que la quiere sola
y limpia y con gana de recibirlas. (santa Teresa de Jesús; V8,9)
Un abrazo
D.G.;Zaragoza
¡Feliz Navidad!