Todo pasa y todo queda pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar.
Queridos hermanos:
Quiero contaron una de mis reflexiones durante esta semana.
Esta mañana oía en RNE 1 una entrevista a Joan Manuel Serrat. Oía como contestaba con la campechanía que le caracteriza a la entrevista de la locutora. Serrat ha sido para nuestra generación un poeta, un trovador, un cantautor y un artista. Muchas de sus canciones y de sus LP eran nuestra música de cabecera, nuestra inspiración y hacían referencia a nuestro ideal de vida.
Muchas veces he reflexionado sobres sus canciones, canciones como “ no escojas solo una parte tómame como me doy entero y tal como soy, no vayas a equivocarte… nunca es triste la verdad lo que no tiene es remedio”•
O el disco de Miguel Hernández o al de Machado con la canción “ Cantares” que es al que me refiero ahora.
Esta semana ha sido el cumpleaños de mi marido, ha hecho 61 años, su sensación es la de que se le pasa el tiempo sin darse cuenta. Yo, haciendo memoria recuerdo como hace ya 10 años le conocí en un chat de internet, y en verdad, el tiempo se hace corto. Estos diez años se me han pasado como un suspiro.
Al ser tiempo de Adviento, de reflexión, de desierto durante mis oraciones matutinas me han venido a la mente muchos episodios de mi vida; unos excelentes y otros menos excelentes.
Mi marido y yo nos conocimos en un momento de encrucijada, ambos estábamos desolados, solos ónticamente, desencantados y defraudados de la vida.
Los diez años que llevamos juntos han sido de sobresaliente, hemos pasado crisis, tenido discusiones, pasado grandes momentos y los momentos más duros de nuestra vida, como ha sido el fallecimiento de nuestras madres.
Mi pasado en Avila, imaginaros un gay que no se acababa de aceptar, incluso bajo la amenaza del alcoholismo. Mi pareja en una situación dramática por otra causa, que no voy a decir aquí, porque es él el que la tenía que comunicar.
Dios pasa por nuestra vida, el tiempo es un pilar en el que se apoya la manifestación de Dios, Xto se nos hace presente en cada gesto, en el momento menos inesperado, en lo cotidiano y en la sencillez. Yo puedo cantar lo del salmo 53, versículo 13 “pues tú salvaste mi alma de la muerte, para que marche ante la faz de Dios, en la luz de los vivos.”
Si hermanos, en cada momento, en mi historia, en cada acontecimiento de mi vida, incluso en los momentos más dramáticos , Dios ha salido a mi encuentro, me ha insuflado su Espíritu, me ha colocado la persona adecuada. Puedo decir que en mi vida ha habido muchas navidades; pero también puedo decir que ha habido momentos en que mi corazón se ha cerrado y lo que he hecho es dar tumbos, buscar quimeras, no andar en verdad.
Que la sencillez del Portal del Belén impregne nuestros corazones para poder acoger en nuestros hogares a ese Xto que se encarna en nuestra historia, se hace pequeño en lo cotidiano, pobre ante nuestra debilidad y agua ante nuestra sed.
Un abrazo
HILARIO