Escribo en mi última noche en Zaragoza,donde quiero comentar mi experiencia el sábado,donde mi querido amigo y confidente Dorian Gay desde hace ya tiempo,me presentó a los miembros de "grupo de los jueves": Alamo,Ignaciano y Luis Manuel (que ya conocí en julio).Fue por tanto un doble placer: volver a ver mi querido hermano y paño de lágrimas Dorian Gay y el poder conoceros.No a tres,sino a cuatro.
Porque después fuimos a la capilla donde hacen sus encuentros de oración y conocí a su pastor. Amable,cercano,cálido,atento...como tiene que ser cualquier pastor. Donde el tiempo que me dedicó para explicarme el funcionamiento de la iglesia fue para él un tiempo útil,porque disfruta con su trabajo de pastor.Desgraciadamente qué difícil es encontarse sacerdotes católicos que te dediquen 20 minutos en explicarte que son,que hacen,que piensan...
Me di cuenta que en realidad el grupo son cinco,no cuatro. Gracias por el tiempo que me dedicasteis. Espero veros muy pronto a los cinco.
Lástima no haberte podido ver,Mudejarillo,hace unos días. Pero ya habrá una próxima vez,estoy seguro.
Y ahora que pienso,no sois cinco,sino seis.Ya sabeis que Él está en medio de vosotros.
