Habían estado toda la tarde hablando sobre Fe el abad y un visitante:
- Mira joven, no se qué decirte, me siento mal porque me da la impresión de que quiero que creas a base de darte cristazos en la cabeza.¡Me siento fatal!
- Pues mira, Padre, yo desanimado y sin ver nada, me cuesta rezar y no sé cómo hacerlo. Sin embargo me atrae muchísimo Jesús de Nazaret.
El Abad Ferran le dijo:
-Quédate a rezar vísperas con nosotros. En vez del Himno del día, vamos al final del templo y recemos juntos, despacio, pensando...una oración a la que recurro cuando no veo nada, pienso que la escribió Brigitte Wolf para mi.
"Señor,
no consigo rezar,
no consigo dar gracias,
no consigo creer.
Tan sólo puedo intentar
mostrar mi amor
a todo ser humano que tiene necesidad de mí
y busca la verdad y la justicia:
ésta es mi oración.
Tan sólo puedo intentar
permanecer al lado
de mi hermano
despreciado por los hombres
para que me desprecien con él:
ésta es mi acción de gracias.
Tan sólo puedo seguir buscando
incansablemente al alma que se ha perdido
bajo los escombros
de lo que debería haber sido tu imagen:
ésta es mi fe.
Señor,si me escuchas,
dame la fuerza
de rezar así
de agradecer así
de creer así."
El joven prosiguió en paz el resto del rezo de Vísperas, pensando que estaba más cerca de seguir a Jesús de Nazaret de lo que creía...
fr. Bernardo Yöel. Valencia