Si el Señor no construye con nosotros,el pequeño grupo,la pequeña aldea, nuestro trabajo se vendrá a bajo. Si los planes del Señor no son nuestros planes,nuestros esfuerzos serán ineficaces.
Él es la piedra angular que sostiene la pared de nuestra obra,nosotros los picapedreros que la tallan para que todos vean que Él es el fundamento de nuestra casa y proyectos personales.
Qué inútil será todo proyecto que olvide que Él sostiene nuestra casa y los proyectos personales, qué fracaso,si ignoramos que Él trabaja a nuestro lado,pegadito a tí.
Señor, tú has de ser el fundamento de nuestra obra, la piedra angular que aguante,el arquitecto que diseñe sus espacios, el jardinero que embellezca nuestras casas.
Que los hombres,los amigos,los vecinos Señor, reconozcan siempre en nuestra casa y actividades tu obra y tu morada, en cada uno del grupo tus obreros,constructores eficaces,que no discutamos los planos, si somos trabajadores de la primera hora o la última,que no nos avergoncemos de ser albañiles ¡que lo pregonemos!
Señor de los planes de futuro, arquitecto de nuestra casa,no permitas que nos creamos autosuficientes,que critiquénos la forma de colocar la piedra el otro, no pongamos zancadillas. No permitas que destruyamos con la lengua lo que manos llenas de callos han construido.
Señor que no forcemos amistades superficiales, que cada uno de nosotros vaya a su pasto favorito y te reconozcamos todos como el buen pastor.
fr.bernardo yöel. valencia
