La Diócesis de Lafayette, Louisiana, está implementando una nueva política que requiere que los estudiantes, padres, profesores y personal de las escuelas católicas vistan ropa y usen los pronombres de “la identidad sexual dada por Dios y el sexo biológico al nacer de cada persona”.

La nueva “Política de identidad sexual” se ha agregado a los manuales escolares 2022-2023. El lenguaje de la política, publicado en tres escuelas diocesanas —Teurlings Catholic High School, St. Thomas More Catholic High School, y Cathedral-Carmel School— establece:

“Están prohibidos el comportamiento y las expresiones de la identidad sexual de una persona dentro del ambiente escolar que sean inconsistentes con estos principios y/o que causen interrupción o confusión con respecto a las enseñanzas católicas romanas sobre la sexualidad humana. Se requiere la plena cooperación con esta política de los funcionarios escolares, el cuerpo docente, los padres y los estudiantes y es una condición previa a la inscripción continua de cada estudiante y el empleo continuo de cada empleado, y la aplicación de esta política por parte de la escuela se considera un mandato espiritual. .”

Si bien esta política no se incluyó en los manuales de años anteriores, el Lafayette Daily Advertiser informó que la diócesis afirma que esta no es una política nueva. Blue Rolfes, director de comunicaciones de la diócesis, sostuvo que esta política proporciona “aclaración por escrito de una política que ha estado en vigor durante bastante tiempo”. Hay más de 30 escuelas católicas en la diócesis, y Rolfes explica que esta política “simplemente explica en detalle las enseñanzas católicas romanas sobre la sexualidad humana y lo que los estudiantes, los padres y el personal escolar pueden esperar cuando se inscriben o son contratados para trabajar en todas las diócesis de Escuelas católicas de Lafayette”.

La breve política de dos párrafos concluye dirigiendo a las personas hacia Hombre y mujer Él los creó, un documento de 2019 sobre género de la entonces Congregación para la Educación Católica del Vaticano.

Desafortunadamente, las políticas restrictivas con respecto a los temas LGBTQ en las escuelas católicas no son nada nuevo. En los últimos dos años, New Ways Ministry ha documentado políticas anti-LGBTQ similares surgiendo enen Milwaukee, Marquette, Arlington, Lansing, St. Louis, Indianápolis, Springfield, Illinois,  y muchas más diócesis de EE. UU. Más recientemente, la Diócesis de Green Bay implementó una nueva política que compara ser abiertamente transgénero con abuso sexual.

Estas políticas van en contra de la buena pedagogía católica, que sostiene que los maestros deben “cuidar la persona integral” de sus alumnos y establecer relaciones personales duraderas. Cuando los maestros respetan y reconocen a los estudiantes por su nombre elegido (ya sea un apodo o un nombre que afirme el género) y pronombres, se fomenta un ambiente de amor y confianza. En Saber como somos conocidos: la educación como viaje espiritual, Parker Palmer, un autor cuáquero, escribió que “el origen del conocimiento es el amor”. Si esto es cierto, entonces la educación católica debería ser una inspiración para el amor profético que inspira un conocimiento transformador, no un refugio para el odio y la ignorancia.

Si la Diócesis de Lafayette está realmente “comprometida a brindar un entorno seguro”, como sugiere su nueva política, debería reconocer las condiciones inseguras que está estableciendo en su escuela y los riesgos que está causando a las familias LGBTQ+. Luego debe revertir esta política y buscar un camino que amorosamente fomente el aprendizaje y el crecimiento.

—Bobby Nichols (él/él), New Ways Ministry, 11 de agosto de 2022

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